En marzo se cumple un año desde que comenzaron los disturbios en Siria y según los datos oficiales de los países vecinos y las cifras de registro de ACNUR unas 30.000 personas han huido hacia los países limítrofes mientras que, a su vez, hay un número significativo de sirios desplazados dentro del país.
Los equipos de ACNUR en Jordania, Líbano y Turquía han estado trabajando durante el último año para apoyar a los gobiernos y las ONG, proporcionando cobijo, asistencia y protección a los refugiados.
En Líbano
En el norte de Líbano, la Comisión Superior de Socorro, ACNUR y otros socios están distribuyendo regularmente alimentos, utensilios de cocina y productos básicos de higiene a los refugiados registrados y a las familias que lo necesitan. El servicio primario de salud se ofrece a través de clínicas públicas y privadas en las que ACNUR está cubriendo la mayor parte de los costes.
Los niños refugiados están acudiendo a escuelas locales y ACNUR junto con sus socios están cubriendo los costes de los materiales educativos y las clases de apoyo, que también se ofrecen a niños libaneses que lo necesitan.
En Bekaa, ACNUR y otras agencias de la ONU, están ofreciendo asistencia a los desplazados junto a ONG locales e internacionales. Esta asistencia incluye la entrega de combustible, alimentos, mantas, colchones y paquetes higiénicos
En Jordania
ACNUR está ofreciendo asistencia a los refugiados urbanos, en forma de materiales de ayuda humanitaria y ayudas económicas, y apoya al gobierno para la renovación y puesta en marcha de unas instalaciones de tránsito en el punto fronterizo de Ramtha.
En Turquía
ACNUR tiene una presencia permanente en Hatay para apoyar los esfuerzos del gobierno y prevé instalar también una oficina en Kilis cuando la población del campo se traslade allí.