ACNUR son las siglas del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados, un organismo que se crea en 1950 para atender a los refugiados de la II Guerra Mundial...
Desde el Comité español de ACNUR llevamos años recaudando fondos como ONG. África es uno de los principales destinatarios de la ayuda humanitaria que enviamos cada mes a...
Cada 20 de noviembre se celebra el Día del Niño en defensa de los derechos de los más pequeños. Unos derechos especialmente vulnerados entre los niños...
El abuso y maltrato de mujeres es, desgraciadamente, un fenómeno presente en todas las regiones del mundo. En algunos países, donde mafias y pandillas callejeras se imponen a...
Para quienes se han visto obligados a huir, la vida se convierte en una lucha constante por la supervivencia. Cada invierno, las temperaturas en Siria, Jordania o Líbano llegan...
Cada segundo, 3 personas huyen para salvar su vida. Muchos tienen que recorrer kilómetros durante días y su único alimento será lo que encuentren por el camino. Cuando el...
En el corazón de Oriente Medio, Siria ha sido desde la Antigüedad un punto estratégico al estar situado en un enclave geográfico. Un lugar de paso...
Cada año, el 1 de diciembre se celebra el Día Mundial de la lucha contra el SIDA, una enfermedad mortal que afecta a más de 36 millones de personas...
Volver a Empezar es el primer podcast del Comité Español de ACNUR, conducido y presentado por Molo Cebrián, creador de Entiende Tu Mente o Saliendo Del Círculo.
En esta nueva temporada de Volver a Empezar hablamos con mujeres que se han visto desplazadas por la fuerza, pero que no se dejan definir por estas circunstancias. Son mujeres incansables, que día a día superan la adversidad y la desigualdad y que además luchan por aquello en lo que creen: una vida digna para todas, para poder vivir en paz. Casi 60 millones de mujeres y niñas están desplazadas en todo el mundo, a ellas les dedicamos la novena temporada del Podcast del Comité español de ACNUR.
En la Temporada 8 de "Volver a empezar", el podcast del Comité español de ACNUR, nos preguntamos: ¿Puede el deporte convertirse en refugio? Para responder a esta pregunta hemos hablado con varias personas refugiadas que han tenido que huir de sus hogares, dejar su país y comenzar de cero en España. Personas a las que el deporte les ha salvado la vida. ¿Y cómo es posible esto? En muchas ocasiones lo es gracias a organizaciones, fundaciones y asociaciones que apuestan por el deporte como herramienta integradora de las personas refugiadas. Y es que el deporte integra, empodera, une, ayuda y puede convertirse en hogar, especialmente cuando el tuyo ha quedado muy lejos.
¿Te imaginas tener que abandonar tu país y empezar de cero para poder salvar tu vida? El protagonista de esta temporada tuvo que hacerlo: le llamaremos Juan. Por motivos de protección, prefiere no decir su nombre, ni de dónde viene, pero sí puede contarnos cómo ha logrado comenzar una nueva vida en un pequeño pueblo de la llamada España rural, ayudando a combatir el despoblamiento. Allí, donde muchos otros no quieren ir, Juan está construyendo un hogar seguro junto a su familia. Acompáñanos a conocer su historia en la séptima temporada del podcast del Comité español de ACNUR.
El cambio climático ha llegado para quedarse y marcar nuestro presente y nuestro futuro. Pero, ¿qué es exactamente? ¿Qué consecuencias tiene y cómo podemos luchar ante su avance? ¿Cómo afecta a las personas más vulnerables del planeta? En la temporada 6 de "Volver a empezar" resolvemos estas preguntas sobre el cambio climático hablando con expertos en el tema. Te esperamos.
Como no podía ser de otra manera, dedicamos la Temporada 5 de Volver a empezar a Ucrania. Queremos conocer de cerca cómo se vive en un país en guerra, cómo es huir de este conflicto y comenzar de cero en un lugar nuevo. Pero también vamos a mostrar qué labor está realizando Acnur en esta situación y cómo podemos ayudar cada uno de nosotros. Te esperamos.
Esta es la historia de una persona que gracias al boxeo tuvo una segunda oportunidad. No solo ella, sino también toda su familia.
Ella es Sadaf. Mujer, boxeadora, refugiada, valiente y luchadora. Nació en Afganistán, uno de los peores países del mundo para nacer mujer. Si quieres conocer su historia, ¡dale al play! y si te emociona tanto como a nosotros, comparte este podcast.
La tercera temporada de Volver a Empezar tiene nombre propio: Sergio Chekaloff. Una persona que ha pasado 74 años buscando el reconocimiento de una nacionalidad.
Su historia es la de millones de personas en todo el mundo que carecen de derechos políticos, jurídicos y sociales por el hecho de no ser considerados ciudadanos. Son apátridas.
En esta segunda temporada de Volver a Empezar conoceremos a Sergio, Gleici y Cristian. Ellos se vieron obligadas a abandonar sus países y que al llegar a España se toparon con una situación excepcional por la pandemia de COVID-19. A pesar de sus dificultades personales, y aún a riesgo de contagiarse, volvieron a armarse de valor para ayudar a quienes más lo necesitaban.
Befriending es la primera temporada de Volver a Empezar. En ella conoceremos la historia de tres mujeres valientes. Dos de ellas lo dejaron todo atrás en sus países para volver a empezar. Una vez en España, forjaron una amistad que les ha ayudado a salir adelante en el día a día.
El clima extremo ha causado estragos durante los primeros días del año entre los cerca de 85.000 refugiados sirios que viven en el campo de Za’atari, el más grande, ubicado en Jordania. Se han inundado refugios, algunas tiendas se han derrumbado y cientos de personas han tenido que esperar a que pasaran las tormentas en alojamientos de emergencias o con vecinos y familiares. Además, las pocas pertenencias que tenían los refugiados se han mojado y se han quedado sin nada. Fátima, de 20 años, y su marido Mohammed, trataban de proteger del frío a sus tres hijos cuando el techo de su tienda se desplomó: “teníamos una pequeña estufa encendida en la tienda para mantenernos calientes y se cayó sobre mi hijo y le quemó la espalda” explica a los visitantes de ACNUR en el refugio donde su familia y ella están alojados con otras siete familias. “Fue puro pánico, todos estábamos muy asustados. Corrimos fuera de la tienda y nos dijeron que viniéramos aquí”, explica. Fátima llevó a su hijo de un año, Bara’a, al hospital que hay en el campo y allí le trataron las quemaduras. Aunque muchos refugiados cuyas tiendas quedaron dañadas por las tormentas han sido acogidos por parientes y amigos, ACNUR ha establecido refugios de emergencia para aquellos que no tuvieran donde ir. Los refugios están equipados con calefactores, colchones y mantas, además, ACNUR está repartiendo agua y comida entre los refugiados. Las tormentas afectan también al campo Las fuertes lluvias y la nieve que se derrite han causado inundaciones en muchas zonas, dañando las pertenencias de los refugiados y convirtiendo las calles en lodazales de agua y barro helado. Los suministros de electricidad en muchas zonas del campo también han quedado cortados. “Esta tormenta ha tenido un gran impacto en los refugiados en el campo y está haciendo su día a día aún más difícil” ha explicado Nasreddine Touaibia, trabajador humanitario de ACNUR. Fuente: ACNUR/ Charlie Dunmore en el campo de refugiados de Za'atari, Jordania
2,4 millones de refugiados alojados en 200 asentamientos en 22 países africanos dependen de ayuda alimentaria. Durante 2013 y 2014 un tercio de estos refugiados ha visto reducidas sus raciones de alimentos entre un 5 y un 60%. “El incremento de las emergencias y conflictos en el mundo ha provocado la reducción de la financiación para las operaciones humanitarias, haciendo que los refugiados más vulnerables, y en situaciones críticas, caigan en el olvido”, ha afirmado el Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados, António Guterres. “Es inaceptable que en el mundo actual de la abundancia, los refugiados sufran hambre crónica”. 800.000 refugiados africanos se encuentran en situación de inseguridad alimentaria 450.000 refugiados en campos y asentamientos de la República Centroafricana, Chad y Sudán del Sur están viendo sus raciones diarias de alimentos reducidas en al menos 50%. En el caso concreto de Chad la reducción es de hasta el 60%. Otros 338.000 refugiados en Liberia, Burkina Faso, Mozambique, Ghana, Mauritania y Uganda han visto sus raciones reducidas entre un 5 y un 43%. Además, desde 2013 se han producido una serie de reducciones en las raciones con carácter temporal en campos de refugiados de varios países como Uganda, Kenia, Etiopía, la República del Congo, la República Democrática del Congo o Camerún. En ocasiones, estas reducciones han sido provocadas también por los problemas de inseguridad que afectan a la distribución de la ayuda humanitaria. Chad, Sudán del Sur y República Centroafricana, los países más afectados Unos 300.000 refugiados en Chad, en su mayoría de la región de Darfur, en el este de Sudán, y del sur de la República Centroafricana, son algunos de los más afectados por las restricciones de alimentos. Las distribuciones de comida se han reducido hasta en un 60%, lo que ha dejado a los refugiados con raciones de apenas 850 calorías al día. En el sur de Chad algunos agricultores han podido cultivar productos en pequeñas parcelas cedidas por el gobierno. En el árido este, en cambio, esta no es una opción para muchos refugiados, ni es una solución viable para los que están llegando. Cada día siguen llegando al sur de Chad refugiados desesperados y hambrientos desde la República Centroafricana, azotada por el conflicto. A su llegada descubren que el hambre no se queda en la frontera. En Sudán del Sur, la inseguridad alimentaria, comenzó en diciembre de 2013 y ya son miles de personas las que la padecen, entre ellos, cerca de 126.000 refugiados sudaneses que se encuentran en Mabban. Desde hace 3 meses estas personas no reciben la cantidad necesaria de alimentos y esto afecta a su salud. Los retos logísticos de transportar alimentos y suministros humanitarios en un entorno muy inestable dificultan también la entrega de alimentos, y el Programa Mundial de la Alimentación (PMA), con el que colabora ACNUR para repartir alimentos en los campos de refugiados, está utilizando diferentes vías para garantizar el suministro. ACNUR y otras agencias están estudiando que sean los propios refugiados los que cultiven sus alimentos, a la vez que se buscan terrenos en los que se pueda cosechar. Entre los recién llegados de la República Centroafricana a Camerún, muchos refugiados padecen malnutrición y se encuentran enfermos tras haber permanecido escondidos en el bosque durante semanas antes de cruzar la frontera. ACNUR está trabajando sin descanso para ayudarles. Más de 85.000 refugiados centroafricanos han llegado a Camerún en el último año y se encuentran en 300 localidades, haciendo más difícil el trabajo de las agencias humanitarias. En Gbiti, la zona más afectada, la tasa de malnutrición severa entre los niños refugiados que acaban de llegar es de cerca del 40% (muy por encima del estándar en emergencias). Con el objetivo de reducir las tasas malnutrición y muerte, ACNUR trabaja con otras organizaciones humanitarias, facilitando alimentos terapéuticos y enriquecidos a los refugiados que padecen malnutrición, y también distribuyendo alimentos, vacunando a los niños y suministrando agua potable, saneamiento y refugio, pues 205.000 niños padecen desnutrición aguda en dichos campos de refugiados africanos. Por todo ello, estos últimos días del año, desde el Comité español de ACNUR se quiere lanzar una llamada de atención sobre esta emergencia e informar sobre el hambre en África y la situación de inseguridad alimentaria en la que viven 800.000 refugiados en África. Ayuda a acabar con el hambre en África. ¡Con un solo euro al día ACNUR puede financiar el alimento terapéutico diario que necesita un niño con desnutrición!
El Instituto Valenciano de la Infertilidad (IVI) a través de su programa de Responsabilidad Social Corporativa (RSC) ha contribuido con su ayuda a repartir tres kits ginecológicos completos para realizar intervenciones de cirugía obstétrica en los campos de refugiados con mayores necesidades en salud reproductiva. Con el proyecto se beneficiarán directamente 18.000 mujeres a las que se garantizará un parto seguro. En el contexto de los refugiados y desplazados, las necesidades en cuanto a la salud reproductiva se acentúan, sobre todo debido a la falta de acceso a cuidados obstétricos de emergencia, a las complicaciones que se pueden tener durante el embarazo que se dificultan con la malnutrición y las epidemias, al alto número de embarazos no deseados, a la existencia de mayor riesgo de violencia sexual por la inestabilidad social, a la realización de prácticas como la mutilación genital o ablación y al elevado riesgo de contraer enfermedades de transmisión sexual como el VIH/SIDA. Durante este año, ACNUR llevará a cabo en los campos de refugiados diferentes actividades relacionadas con la salud reproductiva: atención médica profesionalizada antes, durante y después del parto en maternidades dotadas de los materiales adecuados para garantizar unos servicios de calidad, traslado de pacientes para tratar urgencias obstétricas; distribución de alimentación suplementaria a madres y bebés en los primeros meses tras el nacimiento; asesoramiento sobre el tiempo de espera entre un embarazo y otro; y educación sobre la lactancia materna y los cuidados infantiles. Estas acciones tienen como objetivo evitar la muerte de miles de mujeres refugiadas embarazadas y de sus recién nacidos, lo que supondrá una reducción aproximada del 3% de la tasa de mortalidad global entre este colectivo. Pie de foto: Andreu Miquel, por parte de la Fundación IVI, y Belén Camba, como Responsable de Proyectos y Relaciones Institucionales de la Asociación España con ACNUR.