Gobierno de Navarra, 20 años con ACNUR

El Gobierno de Navarra colabora con ACNUR desde hace 20 años para apoyar a la población refugiada en todo el mundo. Su última aportación, en 2019, ascendió a 180.000€ para dos proyectos en República Democrática del Congo.

Uno de ellos servirá para proporcionar apoyo escolar a la población infantil refugiada proveniente de la República Centroafricana residente en zonas remotas como Ndu, Kanzawi, Bas-Uelé y en los campos de Inke Mole, Bili y Boyabu; y para asegurar el acceso a la educación a población refugiada y local en la provincia de Nord y Sud Ubangui, norte del país.

Los niños refugiados recibirán libros, material escolar y uniformes de primaria y se cubrirán sus tasas de escolarización; se rehabilitarán también dos escuelas que se encuentran en un estado de deterioro en la provincia del Bas-Uelé (en concreto la de Ndu y la de Kanzawi) y se dotará de equipamiento adecuado, además de pupitres y mobiliario para seis aulas, a las escuelas de los campos de Inke, Mole , Bili y Boyabu, en la provincia de Nord y Sud Ubangui. Esta última acción ayudará a lograr que las escuelas se conviertan en un lugar seguro y adecuado tanto para los escolares refugiados centroafricanos como para aquellos congoleños que acudirán también a los cursos evitando así, en innumerables casos, el abandono escolar, principalmente de las niñas.

El segundo proyecto tiene como objetivo garantizar el derecho a la igualdad entre hombres y mujeres, a la seguridad, a la integridad física y a la libertad profesional para las mujeres refugiadas burundesas residentes en la provincia de Kivu Sur.

Para ello, se pretende reforzar las capacidades de las estructuras comunitarias de prevención y protección de la violencia sexual y de género (SGBV) mediante 24 sesiones de formación y de la red de protección local congoleña con el desarrollo de dos talleres entre las autoridades políticas y administrativas locales.

Se pretende también garantizar la seguridad y el empoderamiento socio-económico de las mujeres refugiadas burundesas víctimas de violencia sexual y de género en los dos asentamientos de actuación de este proyecto (un total de 1.200) y la promoción del derecho a la libertad profesional de las más jóvenes (350). Se quiere, a su vez, lograr entornos de cohesión social a nivel comunitario y de promoción de los derechos de las mujeres en un medio ambiente equilibrado, gracias a la realización de movilizaciones sociales.