República Centroafricana

La República Centroafricana sigue siendo el país con mayores necesidades humanitarias per cápita, ya que el 50% de la población tiene que depender de la ayuda humanitaria para sobrevivir, mientras que el 25% se encuentra desplazado internamente o en un país vecino. La grave crisis humanitaria que estalló hace diez años en el país llevó a que alrededor de 1,4 millones de centroafricanos sigan viviendo en situación de desplazamiento prolongado. ACNUR no ha dejado de apoyarles y darles ayuda humanitaria.

Hay más de 650.000 refugiados centroafricanos en países vecinos. Por orden de mayor a menor acogida: Camerún, República Democrática del Congo (RDC), Chad, República del Congo, Sudán, Sudán del Sur.

Sin embargo, se han identificado ciertas zonas adecuadas para promover la repatriación voluntaria. ACNUR apoya a los refugiados centroafricanos en el ejercicio de su derecho al retorno como principal solución duradera a su situación. Con este fin, ACNUR, el Gobierno centroafricano y los actores humanitarios han desarrollado conjuntamente una estrategia nacional para encontrar soluciones duraderas a los problemas de los desplazados internos y los repatriados en la República Centroafricana.

Desde el inicio de la repatriación voluntaria en 2017, ACNUR ha apoyado al Gobierno en la acogida de más de 49.000 personas, 15.000 en 2024. Las principales zonas de retorno son Bangui, Baboua, Baoro, Berbérati, Bouar, Bossemptele, Carnot, Mbaiki y Mongoumba.

Los refugiados centroafricanos siguen manifestando su firme deseo de regresar, y más de 45.000 ya lo han hecho en los últimos años. El 60% de los retornados han sido niños y niñas.

ACNUR pretende apoyar el retorno voluntario a la RCA de 300.000 refugiados centroafricanos para 2028, 40.000 en 2025, pero se necesita mucho más apoyo. De hecho, las previsiones actuales indican que sin un aumento significativo de la financiación y el apoyo, el programa de retorno voluntario podría tardar más de un siglo en repatriar a todos los refugiados centroafricanos. Se necesitan 234 millones de dólares para financiar infraestructura, documentación, apoyo a los medios de subsistencia, acceso a la energía, protección del medio ambiente y servicios esenciales para el retorno y la reintegración de esas 300.000 personas repatriadas en 2028. Hay que actuar de inmediato para no condenar a otra generación al desplazamiento y la dependencia.

Desde 2013, la violencia recurrente ha obligado a cientos de miles de familias a huir de República Centroafricana (RCA). Alrededor de 1,4 millones de centroafricanos (más de 1 de cada 5) siguen viviendo en situación de desplazamiento prolongado.

La grave crisis sigue provocando desplazamientos forzosos masivos, aumentando la presión sobre los recursos y las condiciones de vida en las comunidades y países de acogida.

Según la Oficina de Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA), la República Centroafricana sigue siendo el país con mayores necesidades humanitarias per cápita, ya que el 50% de la población tiene que depender de la ayuda humanitaria para sobrevivir, mientras que el 25% se encuentra desplazado internamente o en un país vecino.

Aunque los combates continúan en algunas zonas, muchas áreas del país (principalmente en el suroeste) han sido aseguradas y son seguras para el retorno.