Alto el fuego en Gaza: un primer paso decisivo para la paz

El miércoles 15 de enero se anunció el acuerdo del alto el fuego en Gaza que entró en vigor el domingo 19. Tal y como ha expresado Filippo Grandi, el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados, este acuerdo “traerá un inmenso alivio a la devastada Gaza. Nos alegramos con todos aquellos para quienes la pesadilla ha terminado”. Por otro lado, Grandi ha expresado su preocupación y ha dicho que debemos confiar este acuerdo lleve a “negociaciones serias y a una paz justa y duradera para ambos pueblos, de modo que no sean necesarios más alto el fuego”.

Tras 15 meses de guerra en Gaza, este acuerdo para garantizar el alto el fuego y la liberación de rehenes es, sin duda, un paso importantísimo. La ONU también ha subrayado la importancia de la unidad palestina para lograr una paz y estabilidad duraderas. Este acuerdo es el primer paso de un objetivo más amplio, que es lograr por la vía política un futuro mejor tanto para palestinos como israelíes y para la región en general. De ahí también el llamamiento a que todas las partes implicadas mantengan su compromiso con el acuerdo y garanticen su cumplimiento.

Por su parte, António Guterres, el Secretario General de la ONU, anunció que este acuerdo es “un primer paso decisivo”, en unas declaraciones a la prensa en la sede de Naciones Unidas. Guterres, elogió a los mediadores en el acuerdo, Egipto, Qatar y Estados Unidos por su dedicación en la obtención del pacto.

Casi todos los habitantes de Gaza han sido desplazados, ya que tiene unos dos millones y 1,9 millones se han visto obligados a abandonar su hogar, según la Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos (UNRWA). Esta agencia es la “columna vertebral” de la ayuda humanitaria en la región y ha sufrido enormes pérdidas, ya que 265 miembros de su personal han perdido la vida.

Ahora lo principal es aliviar, en la medida de lo posible, el sufrimiento de la población y por eso, la ONU ha manifestado su disposición a apoyar la aplicación del acuerdo y aumentar la entrega de ayuda humanitaria continuada.

Guterres ha advertido: “Es imperativo que este alto el fuego elimine los importantes obstáculos políticos y de seguridad para la entrega de ayuda en Gaza, de modo que podamos apoyar un aumento importante de la ayuda humanitaria urgente para salvar vidas. La situación humanitaria alcanza niveles catastróficos”. Es esencial que la ayuda llegue de manera rápida, segura y sin trabas a la población civil.

Durante su intervención, Guterres también quiso mencionar a la población civil entre las que ha habido miles de víctimas mortales, entre ellos personal de la ONU y trabajadores humanitarios. Entre esas personas hay al menos, según UNICEF, 14.500 niños y niñas. Además, hay miles de menores heridos y unos 17.000 no acompañados o separados de sus padres y casi un millón han sido desplazados de sus hogares.

Para estos niños y niñas la llegada de ayuda humanitaria es clave para poder sobrevivir. Tener acceso a agua potable, alimentos, atención sanitaria (especialmente tener acceso a vacunas y la prevención de brotes de enfermedades) y apoyo psicosocial pero también a educación.

El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Volker Türk, declaró el miércoles que esta noticia de la primera fase de un alto el fuego va unida al inmenso alivio tras “tanto dolor y miseria durante los últimos 15 meses”. Afirmó que ahora las prioridades para la población civil son alimentos, medicinas, agua, protección y refugio.

Tal y como dijo Tedros Adhanom Ghebreyesus, director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), “la paz es la mejor medicina” e indicó que este acuerdo es alentador pero que se han perdido demasiadas vidas y miles de familias han sufrido. También ha dejado claro que las necesidades sanitarias en la Franja siguen siendo inmensas.

Este acuerdo de alto el fuego es esperanzador y supondrá un alivio en el sufrimiento de la población civil en la región, pero es esencial que se mantenga, que se respete el derecho internacional y se eliminen los obstáculos que impidan salvar vidas y hacer llegar la ayuda humanitaria.