Los primeros meses de 2015 han vuelto a ser testigo de movimientos masivos de población. ACNUR, en primera línea de acción, trata de acompañar y cubrir las necesidades de estos pueblos que no dejan de crecer y de precisar refugio y protección. En Siria, cada vez hay más mujeres, hombres y niños afectados por la guerra; Oriente Medio no deja de sufrir los ataques de grupos insurgentes, y la violencia sigue aumentando en otros lugares de África. El 60% de los nuevos desplazamientos se producen en cinco países: Irak, Sudán del Sur, Siria, la República Democrática del Congo (RDC) y Nigeria.
Paralelamente, surgen nuevas y peligrosas tendencias que habría que tratar desde su origen, como las travesías por el Mediterráneo, que ya han acabado con la vida de 1.700 personas en lo que llevamos de año, o los desastres naturales, imprevisibles, como el terremoto de Nepal que ha dejado a casi tres millones de personas a la intemperie. Cada día 30.000 personas abandonaban sus hogares buscando refugio; se trata de una cifra sin precedentes desde las Grandes Guerras del siglo XX.
Sin embargo, las nuevas dificultades y retos que se presentan no nos paralizan. Por el contrario, nos llenan de energía y fuerza para seguir trabajando, apoyando, creciendo, haciendo equipo, luchando y no olvidando a ninguno de los más de 53 millones de refugiados y desplazados que hay en el mundo en el momento actual.
En esta edición contamos como en 24 h los equipos de ACNUR trabajaron a contra reloj para entregar la primera ayuda y siguen presentes en las fases de recuperación tras el terremoto de Nepal.