La crisis climática se ha convertido en una preocupación mundial que afecta a cada una de las personas que habita el planeta. Cada acción cuenta para alimentar o poner freno a a la emergencia climática. ACNUR trabaja desde los años 90 una política de respuesta humanitaria que suponga el menor impacto posible en el medio ambiente a través de proyectos de reforestación y energías renovables, entre otras alternativas. Esto se traduce en diferentes proyectos: reforestación, energías renovables, combustibles ecológicos y otros proyectos de reciclaje y cuidado del entorno.
Reducir su impacto en el medioambiente, atender a desplazados climáticos y socorrer a víctimas de desastres naturales cuando los gobiernos afectados lo solicitan son los tres principales desafíos de ACNUR ante el cambio climático.
Tras su viaje a Nigeria y con motivo del Día de la Mujer, Leticia Pérez, técnica de Proyectos del Comité español de ACNUR, nos cuenta cómo la falta de agua potable y otros servicios básicos atenta contra la salud y el progreso de las mujeres refugiadas.
El cambio climático es un problema que afecta a toda la población mundial pero especialmente a las personas desplazadas y refugiadas. ACNUR trabaja desde hace años para que su trabaje impacte lo menos posible al medio ambiente. Te lo contamos en la última edición de la revista.