Hasta ahora, ACNUR ha evitado brotes importantes de COVID-19 en entornos de refugiados. En muchas operaciones, las tasas de transmisión son similares o más bajas que en las comunidades de acogida. Su nuevo reto: que la vacuna llegue a los refugiados.
ACNUR no adquiere vacunas ni tampoco las administra, ya que esto es una responsabilidad de los países de acogida. Lo que sí hace ACNUR es abogar por la inclusión equitativa de los refugiados, los desplazados internos y los apátridas en los planes de vacunación de los países de acogida a través del apoyo de COVAX, una iniciativa de colaboración mundial cuyo objetivo es acelerar el desarrollo de vacunas contra la COVID-19 y garantizar un acceso justo y equitativo para todos los países.
Además, se cumple el 10º aniversario de la guerra en Siria entrevistamos a la española Elena Cibeira, Responsable de Educación de ACNUR en Líbano, uno de los países que más refugiados sirios acoge. Lleva casi cinco años allí cambiando vidas gracias a personas como tú.
En esta edición te contamos cómo ACNUR sigue trabajando para conseguir un reto: que la vacuna contra el COVID-19 llegue a la población refugiada, desplazada y apátrida. Este y otros temas interesantes como emergencias como la de Siria, Yemen, Etiopía y más.