Hogares. Ganado. Cultivos. No llueve y lo han perdido todo. La sequía extrema en el Cuerno de África extingue toda vida a su paso. Cientos de miles de personas huyen de ella para librarse de ese destino. No es una cuestión baladí. Tras la sequía llega el hambre y en los últimos 40 años no se ha visto una igual. Somalia, Etiopía y Kenia están siendo los países más afectados. Millones de personas necesitan ayuda urgente para sobrevivir.
Las cifras asustan: 20,5 millones de personas pasan hambre en el Cuerno de África. 7 millones de niños y niñas desnutridos y 1,5 millones de refugiados, desplazados internos y población local es el número de personas a las que ACNUR quiere dar asistencia y protección.
Por otro lado, también hablamos de Ucrania, y del duro invierno que les espera con temperaturas de hasta -20 grados. Más de 800.000 familias han perdido su hogar a causa de la guerra y ahora no tienen un lugar en el que resguardarse del frío.
Hay tantas emergencias a las que enviar una ayuda extra que, este año, por primera vez, nuestra campaña de Navidad tiene un doble destino: la sequía en el Cuerno de África, la peor en 40 años; y Ucrania, un país que sigue sufriendo una guerra atroz. Gracias por ayudarnos a diversificar esfuerzos.