Se cumplen 3 años desde que Rusia invadiera Ucrania. Tres años en los que las necesidades humanitarias y de protección siguen siendo enormes entre las poblaciones más vulnerables, tanto dentro de Ucrania, como en los países vecinos que acogen a personas refugiadas.
Tres años de miedo, violencia y desesperación. Las hostilidades continúan y millones de personas siguen necesitando ayuda. ACNUR sigue presente en Ucrania y en los países vecinos ofreciendo asistencia, protección y ayuda humanitaria. No olvides que la guerra no ha terminado, como tampoco lo ha hecho el sufrimiento de la población. Por favor, colabora.
Las necesidades humanitarias y de protección siguen siendo enormes entre las poblaciones vulnerables dentro de Ucrania y entre la población refugiada en los países vecinos. En Ucrania, el Plan de Necesidades Humanitarias y Respuesta de 2025 prevé que unos 12,7 millones de personas necesitarán asistencia urgente y servicios de protección. ACNUR también está presente en los países de acogida como Bulgaria, República Checa, Estonia, Hungría, Letonia, Lituania, Polonia, Moldavia, Rumanía, Eslovaquia donde se planea ayudar a 752.000 personas refugiadas.
Unos 3,6 millones de personas siguen desplazadas dentro del país, con unas 160.000 personas desplazadas de las zonas de primera línea del conflicto. Otros 6,3 millones de ucranianos han buscado refugio en Europa, y las evaluaciones de ACNUR destacan los retos actuales y emergentes, especialmente a medida que las vulnerabilidades aumentan con el tiempo.
ACNUR está presente en Ucrania desde 1994 y desde el comienzo del conflicto ha estado proporcionando protección y asistencia humanitaria, incluida la reparación de refugios a las personas afectadas. Además, apoya el establecimiento de centros de acogida, proporciona materiales de primera necesidad y refugios de emergencia. ACNUR sigue facilitando el acceso a la asistencia jurídica, el apoyo psicosocial y otros tipos de asistencia a las personas en mayor situación de vulnerabilidad. Además, tiene en marcha un programa a gran escala de ayudas económicas para que la población desplazada pueda cubrir sus necesidades básicas.
El apoyo continuado de la comunidad internacional a la respuesta humanitaria en el país y a los países vecinos que acogen a personas refugiadas sigue siendo fundamental. La población civil está sometida a una inmensa tensión psicológica y física, con bombardeos continuos y ataques selectivos contra las infraestructuras que perturban la vida cotidiana.
Desde finales de septiembre, ACNUR comenzó a preparar su respuesta para los meses de invierno. El objetivo es ayudar a las personas vulnerables dentro de Ucrania y en los países vecinos. Durante el invierno ha continuado implementando su plan y hasta el diciembre había asistido a más de 242.000 personas con: