El pasado 28 de septiembre, la isla indonesia de Célebes se vio azotada por un devastador terremoto de 7,5 de magnitud y un tsunami. Más de 2.000 personas perdieron la vida...
El pasado 28 de septiembre, la isla indonesia de Célebes se vio azotada por un devastador terremoto de 7,5 de magnitud y un tsunami. Más de 2.000 personas perdieron la vida y 5.000 quedaron gravemente heridas. Se tardó semanas en poder hacer una evaluación total de los daños dado que los servicios de rescate no pudieron acceder durante días a varias de las áreas afectadas.
La destrucción material afectó a las vías de comunicación, a colegios y hospitales y a las infraestructuras básicas, lo que provocó una emergencia humanitaria que afectó a miles de personas. 10.000 familias se quedaron sin hogar y sin ningún tipo de techo bajo el que refugiarse durante días.
La intensa actividad tectónica en la zona, donde convergen dos grandes placas, provoca numerosos terremotos y erupciones volcánicas. Cuando los terremotos tienen lugar en el mar, una consecuencia inmediata puede ser un tsunami, una inmensa ola que golpea violentamente las costas cercanas causando graves inundaciones.
En 2004, un tsunami provocó 260.000 muertos en Indonesia y en 2011, otra inmensa ola afectó a las costas orientales de Japón, matando a 15.000 personas y estando cerca de provocar un desastre nuclear al dañar varias centrales nucleares.
El cambio climático podría influir en la generalización de desastres naturales como los tsunamis o los huracanes más frecuentes y violentos.
La respuesta a la emergencia humanitaria provocada por el terremoto y tsunami en la isla de Célebes pasará a la historia por ser la primera vez en la que se activó el Comité de Emergencia en España. Esta plataforma fue creada en 2015 por 6 ONG (ACNUR Comité Español, Acción Contra el Hambre, Médicos del Mundo, Oxfam Intermón, Plan International y World Vision) para lograr recaudar una ayuda rápida y efectiva en casos de emergencia.
Las ONG del Comité de Emergencia recaudaron casi medio millón de euros gracias a los donativos de más de 25.000 personas. Los fondos obtenidos se repartieron entre las 6 ONG del Comité que se invirtieron en la entrega de refugios y material de emergencia como colchones, mosquiteras y lámparas solares para los damnificados y para garantizar que tuvieran acceso a agua potable, comida y medicamentos.
Una vez solventada la primera fase de la crisis humanitaria, el Comité de Emergencia comenzó a calcular el coste económico y el tiempo necesario para poder recuperar las zonas devastadas por el tsunami. Las fases de postemergencia, que se desarrollan actualmente, podrían durar hasta 6 meses y la rehabilitación total llevará hasta dos años.
“Los supervivientes no solo han perdido sus hogares, sino también sus medios de vida", declararon en noviembre portavoces del Comité de Emergencia a los medios de comunicación, haciendo balance del trabajo realizado hasta la fecha. "Queda un largo camino por delante: reconstruir hogares, caminos, mercados, medios de vida…".
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