Cuando las temperaturas descienden algo aparentemente tan sencillo como una manta o un calefactor puede marcar la diferencia entre la vida y la muerte. Cuando has tenido que huir de tu hogar prácticamente con lo puesto, cuando no tienes un techo en el que resguardarte... tu vida se puede convertir en una auténtica pesadilla.
El invierno provoca un mayor sufrimiento a las personas que lo han perdido todo y luchan por sobrevivir. Esta es la situación a la que se enfrentan millones de personas refugiadas y desplazadas en el mundo. Por eso, ayudar a las familias a llevar mejor las bajas temperaturas es uno de los principales objetivos de ACNUR durante el invierno.
Colabora con ACNUR para que podamos hacerles llegar algo de calor en la estación más dura del año.
En nuestra búsqueda de hallar la mejor forma para ayudar a las personas refugiadas en la temporada de invierno, hemos ideado la “winter box”.
Es una caja que contiene artículos básicos para sobrellevar el invierno. Estos artículos que damos por sentados en nuestro día a día, para millones de personas en el mundo no lo son, teniendo en cuenta que han tenido que huir de su hogar casi con lo puesto.
Las "winter box" contienen:
Cuando lo has perdido todo, algo tan sencillo como estos artículos pueden brindar dignidad y calor para sobrellevar el duro invierno.
Hay países del mundo donde las temperaturas en invierno llegan a ser extremas y donde, además, hay una gran cantidad de personas desplazadas y refugiadas que no tienen las condiciones necesarias para protegerse del frío. ACNUR ayuda a estas personas a sobrellevar el invierno de la mejor manera posible.
La escalada del conflicto en Oriente Medio en las últimas semanas, hace que este sea el peor invierno en años para muchas de las familias de la región. Los ataques en Líbano han provocado millones de desplazamientos. Esta situación añade presión a los esfuerzos regionales para atender a la población siria desplazada en Líbano, Jordania y dentro de la propia Siria. Por ello, ACNUR tendrá que redoblar los esfuerzos este invierno para asegurar su protección y bienestar. Sus equipos en los tres países están proporcionando calefactores e iluminación solar, reparando y aislando refugios, ayuda en efectivo y acceso a servicios sanitarios.
Las y los refugiados ucranianos van a pasar otro invierno envueltos en un conflicto sin visos de acabar. Para los que se encuentran lejos de casa, ACNUR hace hincapié en su bienestar físico y mental. Por ello, en Moldavia, además de dar ayuda en efectivo para los más necesitados, también proporcionará atención psicológica a las personas con alguna discapacidad y a las supervivientes de violencia sexual y de género. Dentro de Ucrania, donde los ataques a infraestructuras no cesan, se reforzará un año más la reparación y aislamiento de refugios y se garantizarán sistemas de calefacción en los hogares, que permitan afrontar el invierno en condiciones dignas.
En Afganistán y en los países vecinos, como Pakistán, las familias han sufrido décadas de conflictos, así como catástrofes naturales recurrentes. Para proteger a la población de los duros inviernos de la región, ACNUR está reparando y construyendo refugios y proporcionando calefactores para mantener calientes los hogares.