En el Norte de Centroamérica, decenas de miles de personas se han visto obligadas a huir por la situación de creciente inseguridad y violencia. En El Salvador, Honduras y Guatemala, las bandas criminales extorsionan, secuestran, violan y asesinan a la población. La violencia en Centroamérica no se detiene.
En 2018, había en todo el mundo 353.210 refugiados y solicitantes de asilo procedentes de esta región, una cifra que casi se ha quintuplicado en los últimos cuatro años.