Fundación Bancaja y Bankia siguen comprometidos con las personas refugiadas. En este 2019, con la población refugiada sudanesa en Chad.
La Fundación Bancaja y Bankia apoyan el trabajo de ACNUR en los siete campos con más necesidades de los 14 de población sudanesa refugiada que hay en Chad: Amnaback, Farchana, Treguine, Bredijing, Gaga, Goz Amir y Djabal. En ellos, se quiere mejorar las condiciones de acceso a fuentes seguras de agua, tratando de aumentar la disponibilidad de litros por persona y día con la construcción y mantenimiento de infraestructuras (pozos, tanques, redes de distribución, etc). Otra parte importante del trabajo de ACNUR será la construcción y rehabilitación de letrinas. Además, se pretende sensibilizar y movilizar a las comunidades beneficiarias y reforzar las capacidades de los comités de gestión de agua y de gestión de residuos. Este trabajo mejorará la vida de más de 200.000 personas.
ACNUR empezó a estar presente de forma continua en Chad en 2003. Desde entonces, desarrolla operaciones en favor de las personas refugiadas, desplazadas y de las poblaciones de acogida. El fortalecimiento de las relaciones entre Chad y Sudán a principios de 2010 favoreció la mejora de la seguridad en el este de Chad. El despliegue conjunto de ambos países de una fuerza de vigilancia fronteriza impidió las incursiones de grupos rebeldes. A pesar de ello, la mayoría de las más de 300.000 personas refugiadas sudanesas (la mayoría mujeres y niñas y niños) en Chad son reacios a retornar a sus lugares de origen debido a la profunda inestabilidad que reina en la actualidad en la región sudanesa de Darfur.
El trabajo continuo por más de diez años entre la Fundación Bancaja y Bankia y ACNUR ha hecho posible que miles de personas en Costa Rica, Ecuador, Colombia, Etiopía, Líbano, República Centroafricana y ahora en Chad, hayan conseguido recuperar sus vidas y tener un futuro seguro.
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