Cuando decidimos dar nuestro dinero a una organización humanitaria, nos gusta saber dónde está yendo a parar. Por eso, la transparencia en las cuentas de donaciones a ONG es esencial para los donantes.
En el caso de las agencias de la ONU como ACNUR, que se dedica a ayudar a los refugiados en todo el mundo, las cuentas son doblemente auditadas:
Desglosamos qué es lo que se hace con cada euro de las donaciones a la ONG del Comité español de ACNUR para que entiendas en qué se traduce tu colaboración:
Cada mes de junio, ACNUR publica un informe con el desglose del gasto anual, por países y partida. Este informe se llama Global Report. El de 2016 expresa en céntimos a qué se ha destinado el dinero por cada 100 € empleados:
¿Qué es el fondo de reserva? Además del dinero destinado a las operaciones del terreno, el 7,5% del dinero recaudado se guarda como “Fondo de reserva”. Este dinero es el que se utiliza para poder dar asistencia ante imprevistos y hacer frente a gastos excepcionales provocados por emergencias, como el estallido de la violencia en Myanmar en 2017 y la huida de cientos de miles de rohingya a consecuencia de ello.
¿Qué son los fondos generales? La gran mayoría de las donaciones a ACNUR están preasignadas por el donante a una emergencia concreta (Por ej., emergencia siria).
Sólo el 15% de los fondos llegan “sin asignar”, lo cual quiere decir que tienen un destino flexible y se podrán asignar a donde más se necesite. A esta bolsa es donde van a parar todas las cuotas de los socios, que permiten priorizar las emergencias o situaciones en mayor necesidad en cada ocasión, además de actuar de forma más rápida y eficaz ante una crisis.
A pesar de que las donaciones públicas y privadas crecen cada año y así es posible enviar cada vez más ayuda a quienes han tenido que huir, las necesidades aumentan aún más deprisa.
Las guerras de larga duración como la de Siria o Sudán del Sur hacen que cada vez más personas necesiten ayuda llegando al récord de refugiados desde la II Guerra Mundial.
En 2016, el 41% del presupuesto necesario no fue cubierto. Cuando pasa esto, los trabajadores de terreno se ven obligados a recortar ayuda totalmente necesaria.
En 2017, fue necesario reducir el 50% de las raciones de comida en países como Sudán del Sur, un país en alerta de hambruna donde más de la mitad de la población son niños.