Ser solidario, ¿un valor en alza o en declive por la crisis?

“En el mundo actual lleno de desigualdades ser solidaria significa para mí ser congruente con mis principios y hacer frente en la medida que me es posible, a la injusticia social. Participar en el proyecto Befriending* para mi familia ha supuesto ponernos en contacto con una realidad muy distinta a la que vivimos y nos ha permitido empatizar aún más con la situación de desarraigo y desconexión que supone la huida de un área en conflicto. Ha sido una experiencia muy enriquecedora, tanto en el aspecto cultural como en el emocional” > Ver más testimonios a la derecha

Laila Oudda Santos, participante del proyecto Befriending.

“La solidaridad no puede medirse sólo con dinero como mucha gente cree. Ser solidario implica ver y reconocer las necesidades de los demás, algo a lo que no se nos acostumbra cuando crecemos ya que se nos insta a centrarnos más en nuestros deseos que en lo que ocurre alrededor. Sin embargo, cuando ves la alegría de una persona que valora el pequeño gesto que has tenido, sientes algo diferente, una sensación de satisfacción difícil de describir si no se ha vivido. Hay muchas formas de solidaridad y no hay mejores ni peores… El fin siempre es aportar algo positivo a los demás. Si somos capaces de mirar e identificar lo que pasa alrededor, seremos personas más abiertas y dispuestas a cambiar el mundo en el que vivimos”

Bárbara, 3 años siendo socia del Comité español de ACNUR.

“Vivimos en un mundo globalizado que paradójicamente nos mantiene conectados en redes virtuales y desconectados en la realidad. La solidaridad es el valor humano que nos mueve y nos acerca el uno al otro para hacer algo sin esperar alguna recompensa. Siempre decimos que queremos un mundo mejor, y ¿qué hacemos cada uno para conseguirlo? Aunque un acto solidario no va a cambiar el mundo, sí que va a aliviar a personas concretas. ¿Tú cómo te sentirías si alguien hiciera algo por ti?”

Adina, antigua voluntaria.

“Para mí, ser solidario es tener la posibilidad de colaborar con eficaces ONG como ACNUR aportando un poquito de lo mío a las personas que lo necesitan y compartiendo con ellos. Todo esto actuando desde el corazón y con todo el amor del mundo porque soy de la opinión de que lo que se da vuelve, así que... Es una manera de garantizarme el amor y que mi corazón siempre va a estar vivo... ¡Es una suerte ser legataria de ACNUR!”

Olga, ha dejado su legado a ACNUR.

“Para mí, ser solidaria es apoyar y ayudar, estar ahí cuando alguien te necesita, independientemente de cómo o con cuánto. Todos podemos colaborar de alguna manera. Yo colaboro con varias ONG, pero en mi día a día trato de ayudar siempre que puedo, creo que es lo que tengo que hacer. El día de mi boda tenía que ser un día de celebración y feliz, y así lo fue. Pero no podía olvidarme de los que no lo están pasando bien, así que pensé en convertir mi fiesta en un momento especial también para ellos y colaborar, aunque fuera un poquito. El Comité español de ACNUR me lo puso fácil y pudimos canalizar nuestra ayuda para los refugiados, compartirlo con los invitados y animar a la gente a apoyar y a ser solidarios”

Lorena decidió ser solidaria en su boda a través de tarjetas solidarias con ACNUR.