ACNUR trabaja desde 2012 en el Programa Educa a un Niño apoyando la escolarización en 14 países de acogida: Siria, Yemen, Irak, Malasia, Pakistán, Sudán, Sudán del Sur, Ruanda, Uganda, Kenia, Chad, Camerún, Malaui y México. El objetivo es asegurar que 364.000 niños y niñas puedan acceder a educación primaria de calidad (entre 2020 y2022)
La educación es un derecho humano básico, pero la realidad, es que un niño refugiado tiene cinco veces más probabilidades de no ir a la escuela que el resto.
Asegurar el acceso a la educación evita que los niños refugiados se vuelvan cada vez más vulnerables. De lo contrario, pueden convertirse en víctimas de trabajos inseguros y explotación. Para las niñas, existen peligros adicionales como consecuencia el matrimonio infantil, el embarazo precoz, la servidumbre doméstica o la explotación sexual cuando llegan a la adolescencia.
Dentro de ese programa, la aportación económica de 3.000,00 € de la Fundación Ibercaja y la Fundación CAI ha contribuido a la ejecución de este programa de educación. Con dicha aportación, 580 beneficiarios podrán acceder a 435 libros de texto, 95 kits de material escolar, así como ver equipada un aula para 50 alumnos con pupitres y pizarras. Se trata de facilitar y potenciar el acceso a una educación con garantías, que pueda ser duradera en el tiempo y que, finalmente, permita a los beneficiarios el disfrutar de posibilidades que han podido perder al verse obligados a huir junto con sus familias.
Ayuda a los refugiados