Emergencia en República Democrática del Congo Emergencia en República Democrática del Congo

Emergencia en República Democrática del Congo

¿Con cuánto quieres colaborar?

Test IRPF Text1

La República Democrática del Congo sufre una escalada de violencia que está provocando desplazamientos a gran escala tanto dentro como fuera del país. Más de medio millón de personas han abandonado sus hogares en Kivu del Sur.

La violencia lleva a miles de personas a verse obligadas a abandonar sus hogares. Las familias huyen traumatizadas, con cicatrices físicas y psicológicas. Muchas denuncian haber sufrido abusos, algunos sexuales, durante su huida.

Además, más de 28 millones de personas sufren actualmente inseguridad alimentaria aguda. Además, las pasadas inundaciones del mes de abril dejaron miles de desplazados y personas afectadas.

La situación es devastadora. Puede que República Democrática del Congo no sea un conflicto tan visible, pero su población necesita ayuda urgente.

¿Qué está pasando en el país?

Para comprender el contexto de la República Democrática del Congo (RDC) hay que explicar que es un país que lleva décadas de conflictos que han arrastrado a la población a una situación de vulnerabilidad y necesidad de asistencia humanitaria. Este es el resumen de lo que ha pasado en lo que va de año:

  • Enero: la inseguridad sigue aumentando en las provincias de Kivu del Sur y Kivu del Norte. El grupo armado M23 toma el control de la ciudad de Goma, además de la emisora de radio y el aeropuerto.
  • Febrero: la situación es muy tensa en Bukavu (provincia de Kivu Sur) ya que el grupo armado M23 controla las zonas clave de la ciudad. Miles de personas están huyendo desde esta zona a Burundi ante la creciente tensión y violencia que existe.
  • Marzo: al parecer el M23 se hizo con el control de Walikale y sus alrededores, unas 80.000 personas huyeron al territorio de Lubutu, en la provincia de Maniema.
  • Abril: continúan los combates en el territorio de Masisi que han provocado 77.000 desplazados. Además, unas lluvias torrenciales causaron graves inundaciones en Kinshasa que dejaron 165 fallecidos, heridos, miles de personas desplazadas y afectadas además de viviendas, escuelas y campos destruidos.
  • Mayo: los enfrentamientos entre grupos armados como el M23 y fuerzas gubernamentales persisten en Kivu del Norte y del Sur siguen provocando desplazamientos y necesidades humanitarias. Para agravar la crisis, las inundaciones en el territorio de Fizi causaron la muerte de más de 100 personas, en su mayoría vulnerables, y dejó a unos 2.000 hogares sin refugio en la aldea de Kasaba, a la que ahora sólo se puede acceder a través del lago Tanganica.
  • Julio: el Gobierno de Kinshasa y el grupo rebelde M23 han dado un paso significativo hacia la reconciliación firmando en Doha, capital de Qatar, una Declaración de Principios que podría convertirse en el punto de partida para una paz duradera y la restauración de la estabilidad en una de las regiones más golpeadas por el conflicto en África.
  • Agosto: a pesar del acuerdo de paz firmado anteriormente, los combates continúan, incluyendo ataques contra civiles, detenciones arbitrarias, reclutamiento forzoso y violencia sexual. La violencia continua amenaza los planes para un acuerdo de paz permanente, cuya firma está prevista para el 18 de agosto.
  • Diciembre: los ataques con drones y bombardeos se han reactivado en Kivu del Sur, lo que limita el acceso humanitario y dificulta la asistencia a quienes más lo necesitan. Desde principios del mes, más de 80.000 personas han huido a países vecinos, la mayoría de ellos a Burundi y el resto a Ruanda.

¿Qué está provocando esta situación?

La vigilancia del Grupo Sectorial de Protección, dirigida por ACNUR, sigue documentando violaciones generalizadas de derechos humanos en el este de la RDC. Se reportan extorsiones, saqueos, secuestros y violencia sexual, mientras continúa el reclutamiento de niños por parte de grupos armados. Muchas mujeres y niñas sufren agresiones sexuales durante su huida y, en ocasiones, se ven obligadas a recurrir al trabajo sexual para sobrevivir.

Las personas desplazadas enfrentan necesidades urgentes, especialmente en protección y salud, con acceso limitado a alimentos, agua y saneamiento. Algunas arriesgan su vida cruzando el lago Tanganica en embarcaciones inseguras, lo que ha provocado ahogamientos.

La violencia ha generado saqueos, heridas, interrupciones en servicios esenciales y desplazamientos masivos. La capacidad de acogida está desbordada y los servicios básicos colapsados. Muchas de las personas que huyen cruzan la frontera de los países vecinos y llegan a Burundi, Uganda y Ruanda.

Además, más de 28 millones de personas sufren actualmente inseguridad alimentaria aguda, la cifra más alta jamás registrada en el país. Por otro lado, el este del país enfrenta múltiples emergencias sanitarias simultáneas, como brotes de cólera, Mpox y sarampión.

Foto: © ACNUR/Blaise Sanyila.

¿Cómo responde ACNUR?

La inestabilidad de la región provoca que en algunos lugares del país las operaciones humanitarias sean complicadas. ACNUR y sus socios siguen llevando a cabo intervenciones de protección en Kivu del Norte y Kivu del Sur, entre ellas se incluye la formación de miembros de comités de refugiados y líderes comunitarios para promover la coexistencia pacífica, con sesiones de concienciación e intercambio comunitario. En Kivu del Sur se siguen identificando y siguiendo casos de protección de menores y de violencia sexual, y se presta apoyo médico y psicosocial a los supervivientes, incluidos los menores.

También ACNUR ha comenzado la inscripción de beneficiarios de asistencia en efectivo para desplazados internos en el territorio de Beni. Además continúa con el registro civil y la extensión de la identidad legal de los niños en los asentamientos de refugiados de Lusenda y Mulongwe en el territorio de Fizi. Continúan las evaluaciones de protección y las capacitaciones para la prevención y sensibilización sobre la violencia de género en Kivu del Norte y Kivu del Sur.

En Burundi y Uganda, los refugiados congoleños están siendo trasladados de los centros de recepción a los asentamientos; sin embargo, existe una necesidad urgente de apoyo en materia de agua, saneamiento e higiene, alojamiento y educación en ambos países.

Vídeos