Más de un millón de sirios han regresado a su país desde la caída del régimen de Assad en diciembre de 2024. Además, otros 1,8 millones de personas desplazadas dentro del país también han regresado a sus lugares de origen, lo que demuestra la gran esperanza y las grandes expectativas de los sirios tras la transición política en el país.
Quienes regresan se enfrentan a enormes desafíos. Viviendas e infraestructuras destruidas, servicios básicos deficientes y dañados, la falta de oportunidades laborales y la precaria seguridad ponen a prueba la determinación de la gente para regresar y recuperarse. Y es que a pesar del regreso de estas personas, el país sigue viviendo una situación crítica, ya que lleva años sufriendo una de las peores crisis humanitarias del mundo.
La población sigue necesitando ayuda. ACNUR no ha dejado de apoyar a las personas desplazadas y refugiadas sirias y seguirá haciéndolo también con todas aquellas que deciden regresar. Por favor, ayúdanos a seguir estando ahí para ellas.
Desde la caída del régimen de Assad el 8 de diciembre de 2024, más de un millón sirios han regresado a sus hogares, "muchos de ellos por primera vez en 14 años", tal y como anunció el Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados, Filippo Grandi. La gobernación de Damasco ha recibido el mayor número de retornos del extranjero, seguida de Alepo e Idleb. Esto se suma a los 1,8 millones de desplazados internos que han regresado también.
Desde las organizaciones humanitarias, esperan que durante los próximos meses se produzca un aumento de retornos. En este sentido es fundamental que las personas que vuelven a Siria cuenten con apoyo en materia de alojamiento, medios de subsistencia, asistencia jurídica y protección. Se necesita financiación para poder dar apoyo en esta operación de retorno. Especialmente cuando casi 16,7 millones de personas –el 90% de la población siria– siguen necesitando ayuda humanitaria, y 7,4 millones siguen desplazadas.
A pesar de la caída del régimen de Assad, el país sigue viviendo una crisis económica, social y humanitaria de la que es muy difícil salir. 14 años de conflicto han deshecho casi cuatro décadas de desarrollo económico, social y de capital humano, uno de cada cuatro sirios está desempleado y el PIB se ha reducido a menos de la mitad de su valor de 2011.
Durante 14 años de guerra en Siria, ACNUR ha estado apoyando a las personas refugiadas y desplazadas, y continúa haciéndolo. ACNUR ha comenzado a facilitar el retorno voluntario y ha intensificado su apoyo a los refugiados que deciden regresar, incluyendo asistencia económica y transporte. Desde principios de año, ACNUR ha apoyado a más de 19.300 repatriados sirios en los principales cruces fronterizos con Turquía y Líbano, incluyendo transporte a sus lugares de origen y asistencia logística.
En Siria, la Asistencia Financiera para el Retorno y la Reintegración de ACNUR ha beneficiado a más de 5.700 familias de refugiados. Junto con sus socios, ACNUR también está rehabilitando viviendas dañadas durante el conflicto, brindando un refugio seguro a quienes regresan.
La asistencia adicional en Siria incluye el suministro de artículos básicos de primera necesidad, apoyo para la subsistencia, ayuda para la obtención de documentación y asistencia para la recuperación de la población siria, además de servicios de protección, incluyendo la prevención de la violencia de género, la salud mental y el apoyo psicosocial, y la protección infantil.