La mayoría de las personas que están huyendo de Ucrania son mujeres y niños que han esperado horas para cruzar las fronteras con temperaturas bajo cero y con grandes nevadas. Cientos de miles de niños de Ucrania se han convertido en refugiados de la noche a la mañana y se enfrentan a una situación aterradora y desconocida para ellos. Te necesitan hoy.
Niños de Ucrania como Zlata, en la foto de portada, viven desde hace más de dos semanas en un contexto traumático y difícil de entender para ellos: la huida. Muchos de estos niños se desplazan a través de las fronteras solos, separados de sus padres o familiares. Los riesgos de sufrir violencia, abuso y explotación se multiplican para ellos. Las niñas y niños de Ucrania que huyen del conflicto deben recibir protección y espacios seguros. Es esencial priorizar sus necesidades y seguridad donde sea que se encuentren para intentar minimizar el impacto de la huida y el conflicto en sus vidas.
Además, alrededor de 100.000 niños y niñas, la mitad de ellos con discapacidades, viven en internados y centros de acogida de Ucrania. Hay instituciones que tratan de evacuar a estos niños y niñas a lugares seguros en países vecinos: nadie se queda atrás.
ACNUR con las niñas y niños de Ucrania
ACNUR está preparado para apoyar a las autoridades nacionales a la hora de dar protección a las niñas y niños de Ucrania, especialmente a los no acompañados o que han quedado separados de sus padres o tutores durante la huida.
Además, ACNUR ya está entregando en las zonas fronterizas de Ucrania artículos básicos de emergencia y alimentos para los desplazados internos, instalando tiendas de campaña con calefacción en la frontera y brindando información legal. ACNUR también monitorea la emergencia en las fronteras con países vecinos como Polonia, Rumanía, Moldavia y Hungría y está en contacto con las autoridades de cada país para responder y dar apoyo en la recepción de refugiados.

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