El pequeño Mahmood es uno de los miles de desplazados que necesitan ayuda humanitaria para poder sobrevivir en Yemen. ACNUR trabaja sin descanso para llegar a todos los desplazados por casi cinco años de guerra que dejan un país destruido en el que el hambre y la sed amenazan a miles de víctimas inocentes. Desgraciadamente, las vidas de millones de niños dependen de la ayuda humanitaria. ¡Colabora!
1,8 millones
de niños sufren desnutrición aguda.
3,6 millones
de desplazados internos.
24 millones
de personas necesitan ayuda humanitaria para sobrevivir.
Tremendamente debilitados tras años de malnutrición y falta de agua, los más pequeños no logran superar las enfermedades que se propagan ante la falta de atención médica. Las cifras son trágicas: algunos socios con los que trabaja ACNUR estiman que cada 10 minutos un niño puede morir de hambre. Como consecuencia, no sólo las familias de hoy se verán afectadas: una generación de niños podrá tener problemas de crecimiento y desarrollo el día de mañana.
En 2018, ACNUR y sus socios consiguieron que 12 millones de personas pudieran acceder a servicios de salud. Además, proporcionaron agua, higiene y saneamiento a 11,5 millones desplazados, y refugio a 1,4 millones.
Desgraciadamente, no es suficiente. Hasta el momento, solo se ha recaudado el 35% de los fondos necesarios para hacer frente a esta emergencia.
“Creo realmente que Yemen es una de las mayores tragedias de nuestra generación”
Joung-ah Ghedini-Williams, coordinadora de emergencias de ACNUR.