Ellas son refugiadas sirias en Líbano. Su madre huyó de la guerra de Siria hace más de 12 años. La región de Oriente Medio lleva mucho tiempo pasando por diferentes conflictos y la población sufriendo sus consecuencias.
Desde hace más de un año, la violencia ha crecido en la zona dejando miles de víctimas mortales, personas heridas y desplazamientos pero, sobre todo, ha hecho que millones de personas vivan con miedo. Una vez más, los civiles son las principales víctimas de todos los conflictos.
ACNUR está al frente de la ayuda humanitaria y la protección para la población civil desplazada por la guerra. Contamos contigo para seguir haciéndolo. Por favor, colabora.
El término abarca no solo los países de Oriente Próximo (Turquía, Siria, Líbano, Israel, Palestina, Jordania y Egipto), sino también otros en el Golfo Pérsico y el sur de Asia, como Arabia Saudita, Irán, Irak, los Emiratos Árabes Unidos y, a veces, Afganistán y Pakistán. Es una zona geopolíticamente más vasta que la de Oriente Próximo, que es la región más inmediata desde la perspectiva europea.
En 2023 se recrudeció el conflicto en la zona en el que al inicio, Israel y la Franja de Gaza eran las principales regiones implicadas. La Franja de Gaza con una superficie de 360 kilómetros cuadrados es una de las regiones más densamente pobladas del planeta, en la que viven a casi 1,5 millones de palestinos. El conflicto se extendió a otros países tras los ataques de Israel en el Líbano o en Siria. Entre los últimos meses de 2024 y comienzos de 2025 la región ha comenzado a estabilizarse con una tregua tanto en Gaza como en Líbano. Estas situaciones todavía son frágiles y la comunidad internacional trabaja para que sean definitivas.
Filippo Grandi, Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados, ha hecho referencia al alto el fuego en Gaza: "traerá un inmenso alivio a la devastada Gaza. Nos alegramos por todos aquellos para quienes la pesadilla ha terminado. Pero también debemos confiar en que conduzca a negociaciones serias y a una paz justa y duradera para ambos pueblos, de modo que no sean necesarios más alto el fuego".
De momento, la situación sigue siendo de incertidumbre en varios de los países de Oriente Medio mientras la población civil está sufriendo cada día.
El Líbano es el país que acoge al mayor número de personas refugiadas per cápita en todo el mundo, con una estimación del Gobierno de 1,5 millones de refugiados sirios y más 11.400 refugiados de otras nacionalidades.
Cuando comenzó el conflicto en Gaza, los enfrentamientos a lo largo de la frontera sur de Líbano desplazaron a decenas de miles de personas, entre ellas refugiadas sirias. A finales de septiembre de 2024 comenzaron los ataques israelíes sobre Líbano.
El 27 de noviembre Israel anunció un alto el fuego en El Líbano de 60 días. Ya ha pasado este periodo y ahora hay mucha incertidumbre sobre lo que pasará. A pesar del alto al fuego, las necesidades humanitarias de la población continúan y ACNUR sigue presente proporcionando alimentos, agua, mantas, lámparas solares, bidones y colchones.
El 23 de enero Filippo Grandi, Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados, se reunió con el Presidente del país, Michel Aoun, en un momento esperanzador para el país. Además hablaron de ayudar a la población siria a regresar a su país y trabajar de manera conjunta entre el Gobierno libanés, las nuevas autoridades sirias y ACNUR.
Entre septiembre y noviembre de 2024, Siria recibió a más de medio millón de personas que huían de los ataques aéreos israelíes desde Líbano. De estos, el 60% eran sirios que retornaban, mientras que el resto eran libaneses. Los y las refugiadas sirias que un día salieron de su país cuando estalló la guerra en 2011 buscando refugio en Líbano, se agolparon en las fronteras de vuelta.
El 27 de noviembre, una ofensiva lanzada por grupos armados de la oposición en el noroeste de Siria se extendió rápidamente a diversas regiones del país, alcanzando días después, la capital, Damasco, provocando la caída del presidente Bashar al Assad, dejando a Siria ante un futuro incierto. Estos acontecimientos han dado comienzo a una etapa de incertidumbre, pero también han despertado esperanzas de que la mayor crisis de desplazamiento forzado del mundo pueda resolverse.
Estos últimos 14 años de conflicto han dejado cientos de miles de víctimas mortales, personas heridas y han obligado a huir de sus hogares a más de 13 millones de personas. De estas, más de 7 millones permanecen desplazadas dentro del territorio sirio, mientras que más de 6 millones han buscado refugio en otros países, principalmente en Turquía, Líbano y Jordania, aunque también en Europa y otras regiones del mundo.
Más de 200.000 personas han retornado a Siria. Ahora hay una calma relativa en muchas partes del país y los principales centros urbanos recuperan una apariencia de vida normal. Las tiendas y los mercados están reabriendo, el transporte público funciona y los servicios bancarios se han reanudado parcialmente. Sin embargo, las necesidades humanitarias siguen siendo importantes. ACNUR necesita ayuda para apoyar a las personas desplazadas de Siria, incluidos las desplazadas internas y la población refugiada que puedan regresar a sus hogares en los próximos meses.
La presencia operativa de ACNUR en Jordania es muy amplia, con un equipo de unas 500 personas para asistir a cerca de 700.000 personas refugiadas, en su mayoría procedentes de Siria desde hace más de 10 años. ACNUR centra su operación en las soluciones a largo plazo como la integración laboral, la educación y el apoyo económico para las familias más vulnerables.