Omar padece una enfermedad provocada por la hormona del crecimiento y, a sus ocho años, su cuerpo es el de un niño de cinco. Este será el segundo gran viaje de su vida, pero esta vez hacia un destino donde le espera una oportunidad de recuperar la esperanza. Viajar a Finlandia supone para él no sólo la aventura de coger un avión por primera vez, sino una oportunidad de curarse.
¿Va por encima de la lluvia?
“La falta de tratamiento es lo que más nos afecta y nos destroza” explica su padre. Omar está muy ilusionado con su viaje y no para de preguntar: “¿Va por encima de las nubes? ¿Por encima de la lluvia?” Omar se imagina ya en una gran habitación para él solo, con una ardilla como mascota y, por supuesto, como un niño alto que podrá defenderse por sí mismo.
La familia de Omar es una entre las cientos de miles que han tenido que huir de Siria a causa del conflicto. Su situación en Líbano era extremadamente vulnerable, ya que apenas contaban con recursos para costearse el caro tratamiento de Omar y su hermana, que padece el mismo trastorno hormonal que él. Dada su situación, ACNUR propuso su caso para que la familia fuera reasentada en un país europeo y Omar pudiese ser tratado. Finlandia será finalmente el estado que les acoja y les dé la oportunidad de acceder al tratamiento médico que los niños necesitan.
Omar ya ha puesto rumbo a Finlandia y ha dejado atrás su vida en Líbano. Su familia espera poder encontrar en Europa la oportunidad de retomar sus vidas y, por supuesto, seguir creciendo.
Muchos niños refugiados como Omar siguen necesitando tratamientos médicos y acceso a la educación, además de materiales de ayuda humanitaria básica.