Marzo de 2011 marca el inicio de uno de los peores conflictos de la última década: la guerra en Siria. Según el Observatorio Sirio de Derechos humanos, 500.000 personas han perdido la vida en estos 9 años de guerra en Siria. La crisis de refugiados en el país sigue siendo la mayor del mundo, con 5,6 millones de sirios refugiados en la región. La gran mayoría de ellos, ha sido acogidos por países vecinos, como Turquía (3.576.659), Líbano (914.648), Jordania (654.692), Irak (245.810) y Egipto (129.210).
Los 9 años de guerra en Siria también dejan más de 6 millones desplazados dentro del país, donde el 80 % vive en situación de pobreza y más de 13 millones de personas necesitan ayuda humanitaria urgente para reconstruir sus vidas. La emergencia en Siria continúa.
Desde diciembre de 2019, cerca de 950.000 personas han tenido que huir de sus hogares en el noroeste de Siria, especialmente de las provincias del sur de Idlib y el oeste de Alepo, por culpa de la violencia y los nuevos enfrentamientos. La cifra de desplazados sigue aumentando. En menos de una semana, se han producido casi 50.000 nuevos desplazamientos. Según la ONU, el 80 % de los desplazados son mujeres y niños. El invierno y el frío complican aún más la sitaución de crisis humanitaria que atraviesa la región. Los campos para desplazados internos están abarrotados y muchas personas han tenido que cobijarse en mezquitas y escuelas. En este momento, se necesitan refugios de emergencia urgentemente.
Más de 6,2 millones de personas se encuentran desplazadas dentro de Siria. 5,6 millones de personas están refugiadas en países como Turquía, Líbano, Jordania, Irak y Egipto. Más de 13 millones de personas necesitan ayuda humanitaria para sobrevivir.
Desde que Turquía comenzó los ataques contra las milicias kurdas en el noreste de Siria en el mes de octubre de 2019, 19.861 sirios han cruzado la frontera en busca de refugio en el vecino Irak. Hasta el momento, 244.810 sirios están refugiados en Irak.
En la actualidad hay 74.000 desplazados internos en el noreste de Siria. La población refugiada en el campo de Bardarash, abierto recientemente, ya supera las 13.000 personas y más de 2.400 se encuentran en el campamento de tránsito de Gawilan.
ACNUR amplía su respuesta en Irak ante la continua llegada de refugiados de Siria. Lleva prestando apoyo a las personas refugiadas y desplazadas internas sirias y a los países de acogida desde el inicio de la crisis en 2011, y continuará ofreciendo protección y asistencia a quienes lo necesiten, sobre todo mujeres y niños.
ACNUR trabaja para proporcionar soluciones duraderas a las personas refugiadas. Apoya a los países y comunidades de acogida, promueve la autosuficiencia de los refugiados, y el acceso a los servicios, oportunidades laborales legales y medios de vida; cuando es posible, se ocupa del reasentamiento en terceros países, y planifica el retorno voluntario de los refugiados a Siria de manera segura, digna y sostenible.
ACNUR está en el terreno protegiendo a los más vulnerables. La falta de financiación deja a los refugiados sirios en una situación muy crítica. Se necesitan fondos para afrontar una de las peores catástrofes humanitarias en la actualidad. ¡Ayúdales!
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