Muchas familias escaparon de la guerra en su país de origen y encontraron asilo en otros países. Sin embargo, para algunas de ellas, la vida allí no ha sido fácil, no tienen ninguna perspectiva de rehacer sus vidas con dignidad y autonomía, y necesitan ser reasentadas de manera urgente en otro lugar. Ahora, ACNUR busca brindarles una oportunidad para rehacer sus vidas a través de un proyecto pionero para América Latina y el mundo.
Muchas personas no pueden regresar a sus países de origen por causa de la guerra, la violencia o la persecución. Por distintas razones, muchas de ellas tampoco pueden permanecer en el país donde inicialmente buscaron protección. En estos casos, el ACNUR ayuda a reasentar a las personas refugiadas en un tercer país. Se trata de una solución duradera y de un instrumento fundamental para la protección de las personas refugiadas más vulnerables.
De manera solidaria, personas voluntarias actúan como mentores de las personas refugiadas desde el momento en el que arriban a un país y durante su proceso de integración en la comunidad local.
Estos mentores dan la bienvenida a las familias en el aeropuerto, les facilitan los primeros contactos con la comunidad, les explican el funcionamiento de la ciudad y las ayudan a familiarizarse con los procesos administrativos, incluyendo el acceso a la documentación, y a otros derechos como la salud y la educación. Además, les ayudan a encontrar clases de español y las orientan en la búsqueda de oportunidades laborales. También prestan su colaboración para que puedan elaborar su propio plan de asentamiento. En definitiva, ofrecen un entorno cálido y acogedor que facilita el proceso de integración local.
A pesar del apoyo y la solidaridad que estas familias reciben de la sociedad, deben afrontar numerosos desafíos; necesitan ayuda para empezar de cero y para cubrir sus necesidades básicas.
¡Dona y contribuye a la causa de las personas refugiadas!