En Líbano, la AACID apoya una intervención de ACNUR destinada a proteger a los menores sirios refugiados en la región de Bekaa. En esta región, la mayoría de la población siria vive en asentamientos informales, en condiciones muy precarias, y los menores sirios con frecuencia afrontan riesgos como el trabajo infantil o los matrimonios precoces. Niños y niñas sirios se ven también en ocasiones obligados a abandonar las escuelas libanesas debido a la imposibilidad de sus familiares para poder mantenerse económicamente tras más de nueve años de exilio. Con apoyo de la AACID, ACNUR podrá identificar a los menores más vulnerables e intervenir con ellos y sus familias para que puedan disfrutar de la niñez a la que tienen derecho.
La financiación de la AACID para el programa de ACNUR en Líbano asciende a 1.000.000 de euros y contribuirá también a que los hogares sirios puedan hacer frente a sus necesidades más básicas mediante transferencias de efectivo a aquellas familias extremadamente vulnerables y garantizando que las viviendas informales que han podido levantar en los asentamientos se mantengan en las mejores condiciones posibles.
En Yemen, después de cuatro años de guerra, la población continúa sufriendo la que es considerada la peor crisis humanitaria del mundo. Con la intervención financiada por la AACID con 300.000 euros, ACNUR responderá a las necesidades de protección de niños, niñas y mujeres desplazadas mediante la supervisión constante de sus riesgos, necesidades y nuevos desplazamientos, el apoyo psicosocial directo y referencia cuando sea necesario a otros organismos e instituciones, el fortalecimiento de las redes de protección basada en la comunidad y el mantenimiento de centros comunitarios para población desplazada, fortaleciendo sus capacidades para proteger a las personas más vulnerables.
La respuesta de protección se fortalecerá, además, con asistencia de emergencia en materia de vivienda y de artículos básicos para la supervivencia de las familias desplazadas, de forma que sus condiciones de vida sean menos precarias. De esta manera, se evitará que las familias se vean obligadas a desplazarse nuevamente y se disminuirán los riesgos de que sufran situaciones de violencia, abusos o explotación.
Ayuda a los refugiados