Tras más de una década de emergencias intermitentes en el este de Chad, a lo largo de 2021, ACNUR sigue centrando en mejorar la sostenibilidad de los campos y aumentar la autosuficiencia de los refugiados. Un total de 373.080 refugiados sudaneses se encuentran en esta parte de Chad y se espera que este número crezca a lo largo del final del año.
Desde la llegada masiva de población refugiada sudanesa, el agua y el saneamiento han sido uno de los mayores desafíos para las organizaciones humanitarias. Chad oriental se caracteriza por problemas de hundimiento de la capa freática, bombeo térmico, envejecimiento de la infraestructura y características técnicas que ya no satisfacen las necesidades de la población refugiada.
Contribuyendo al proceso de protección internacional de las personas refugiadas sudanesas en el este de Chad, el Ayuntamiento de Madrid ha concedido una ayuda de 250.000 € para el acceso a los servicios básicos más esenciales de los refugiados, especialmente dentro de la estrategia en la lucha contra la COVID-19, en los seis campos de Iriba: Iridimi, Touloum, Amnabak, Mile, Kounoungou y Oure Cassoni.
Con este proyecto el agua potable y servicios adecuados de saneamiento ya han beneficiado más de 163.228 refugiadas y refugiados residentes en los campos y 7.790 personas en las comunidades de acogida.
ACNUR se ha encargado de mantener y mejorar el sistema de suministro de agua mediante el mantenimiento y rehabilitación de los sistemas hidrológicos de los campos y la mejora de estructuras secundarias de los mismos.
Agradecemos al Ayuntamiento de Madrid su continua solidaridad ante emergencias como esta.
Ayuda a los refugiados