Procedente de los países árabes del norte de África y la península arábiga, la mujer árabe se esconde bajo un velo de mitos y realidades a los...
Somalia, Sudán del Sur, Yemen y Nigeria pasan por una hambruna posiblemente peor que la del 2011. Entonces, 250.000 personas murieron de hambre en Cuerno de África. En pleno siglo XXI,...
ACNUR, la Agencia de la ONU para los Refugiados, pide el cese temporal de todos los traslados de solicitantes de asilo a Hungría desde los países de la...
Según el Fondo Monetario Internacional, entre los 10 países más ricos del mundo hay una mayoría de países de Oriente Medio. Si ampliamos el ranking al...
El proyecto “Acceso a agua potable y saneamiento para la población refugiada sudanesa del este de Chad”, apoyado por la Agencia Asturiana de Cooperación al Desarrollo supone una...
A día de hoy, la guerra en Siria ya se ha cobrado más de 260.000 muertos. Siria en 2018, últimas noticias.
Volver a Empezar es el primer podcast del Comité Español de ACNUR, conducido y presentado por Molo Cebrián, creador de Entiende Tu Mente o Saliendo Del Círculo.
En esta nueva temporada de Volver a Empezar hablamos con mujeres que se han visto desplazadas por la fuerza, pero que no se dejan definir por estas circunstancias. Son mujeres incansables, que día a día superan la adversidad y la desigualdad y que además luchan por aquello en lo que creen: una vida digna para todas, para poder vivir en paz. Casi 60 millones de mujeres y niñas están desplazadas en todo el mundo, a ellas les dedicamos la novena temporada del Podcast del Comité español de ACNUR.
En la Temporada 8 de "Volver a empezar", el podcast del Comité español de ACNUR, nos preguntamos: ¿Puede el deporte convertirse en refugio? Para responder a esta pregunta hemos hablado con varias personas refugiadas que han tenido que huir de sus hogares, dejar su país y comenzar de cero en España. Personas a las que el deporte les ha salvado la vida. ¿Y cómo es posible esto? En muchas ocasiones lo es gracias a organizaciones, fundaciones y asociaciones que apuestan por el deporte como herramienta integradora de las personas refugiadas. Y es que el deporte integra, empodera, une, ayuda y puede convertirse en hogar, especialmente cuando el tuyo ha quedado muy lejos.
¿Te imaginas tener que abandonar tu país y empezar de cero para poder salvar tu vida? El protagonista de esta temporada tuvo que hacerlo: le llamaremos Juan. Por motivos de protección, prefiere no decir su nombre, ni de dónde viene, pero sí puede contarnos cómo ha logrado comenzar una nueva vida en un pequeño pueblo de la llamada España rural, ayudando a combatir el despoblamiento. Allí, donde muchos otros no quieren ir, Juan está construyendo un hogar seguro junto a su familia. Acompáñanos a conocer su historia en la séptima temporada del podcast del Comité español de ACNUR.
El cambio climático ha llegado para quedarse y marcar nuestro presente y nuestro futuro. Pero, ¿qué es exactamente? ¿Qué consecuencias tiene y cómo podemos luchar ante su avance? ¿Cómo afecta a las personas más vulnerables del planeta? En la temporada 6 de "Volver a empezar" resolvemos estas preguntas sobre el cambio climático hablando con expertos en el tema. Te esperamos.
Como no podía ser de otra manera, dedicamos la Temporada 5 de Volver a empezar a Ucrania. Queremos conocer de cerca cómo se vive en un país en guerra, cómo es huir de este conflicto y comenzar de cero en un lugar nuevo. Pero también vamos a mostrar qué labor está realizando Acnur en esta situación y cómo podemos ayudar cada uno de nosotros. Te esperamos.
Esta es la historia de una persona que gracias al boxeo tuvo una segunda oportunidad. No solo ella, sino también toda su familia.
Ella es Sadaf. Mujer, boxeadora, refugiada, valiente y luchadora. Nació en Afganistán, uno de los peores países del mundo para nacer mujer. Si quieres conocer su historia, ¡dale al play! y si te emociona tanto como a nosotros, comparte este podcast.
La tercera temporada de Volver a Empezar tiene nombre propio: Sergio Chekaloff. Una persona que ha pasado 74 años buscando el reconocimiento de una nacionalidad.
Su historia es la de millones de personas en todo el mundo que carecen de derechos políticos, jurídicos y sociales por el hecho de no ser considerados ciudadanos. Son apátridas.
En esta segunda temporada de Volver a Empezar conoceremos a Sergio, Gleici y Cristian. Ellos se vieron obligadas a abandonar sus países y que al llegar a España se toparon con una situación excepcional por la pandemia de COVID-19. A pesar de sus dificultades personales, y aún a riesgo de contagiarse, volvieron a armarse de valor para ayudar a quienes más lo necesitaban.
Befriending es la primera temporada de Volver a Empezar. En ella conoceremos la historia de tres mujeres valientes. Dos de ellas lo dejaron todo atrás en sus países para volver a empezar. Una vez en España, forjaron una amistad que les ha ayudado a salir adelante en el día a día.
En los primeros cuatro meses de 2013, unos 7.300 marfileños han regresado a casa con la ayuda de ACNUR desde la vecina Liberia. “En este momento, ACNUR prevé que retornarán hasta 10.000 refugiados antes de que comience la estación de las lluvias, a finales de junio”, ha dicho Ann Encontre, la Representante de ACNUR en Costa de Marfil. En el mismo período, ACNUR ha organizado la repatriación de unos 100 refugiados marfileños desde otros países. La mayoría desde Togo (89), pero también desde Argelia, Benin, Camerún, Ghana, Guinea y Tailandia. La guerra en ese país provocó que unas 250.000 personas huyeran a Liberia y a otros países y que cientos de miles se desplazaran internamente. La mayoría ha vuelto a Costa de Marfil con la ayuda de ACNUR o por sus propios medios, pero más de 80.000 marfileños permanecen en otros países de África occidental, incluyendo a 61.000 en Liberia. La situación de seguridad ha mejorado y personas como Víctor, han empezado a tener más confianza en que la situación mejoraría. “He vuelto a mi país y estoy contento”, ha contado Víctor a ACNUR tras el reciente retorno a su hogar en el oeste de Costa de Marfil, en un convoy de ACNUR. “Liberia nos trató muy bien, pero no hay nada como tu hogar”, dice este joven de 25 años que ha vivido en el campo de refugiados de Bahn, en el condado liberiano de Nimba, durante dos años. “Las autoridades nos explicaron que la situación de seguridad en Costa de Marfil ha mejorado, y nuestros amigos y familiares en el país nos lo confirmaron”, añadió. ACNUR ha estado animando a la gente a volver. “Volver a tu propio país es una verdadera solución duradera para un refugiado y ACNUR apoya totalmente esta decisión”, dice Ali Tchani Tchacoly, el director de la oficina de ACNUR en la ciudad de Guiglo, en Costa de Marfil. “Los retornados se encontrarán en situación de poder contribuir al desarrollo de su propio país”. ACNUR está también involucrado en los programas que intentan facilitar la reintegración de los retornados. Esto incluye refugios y ayudas a la vivienda, facilitar el acceso a la educación, la rehabilitación de las instalaciones comunitarias como mercados y clínicas y la implementación de proyectos de generación de ingresos.
Esta familia se mudó de Alepo, en el norte de Siria, hacia otra zona rural cuando estallaron los enfrentamientos en su barrio el año pasado. Pero los alimentos pronto empezaron a escasear. Hacia finales de enero de este año, Dana decidió hacer lo que nunca habría creído posible: cruzó la frontera hasta llegar e instalarse en la zona libanesa del Valle de Bekaa. Durante varios meses la familia intentó subsistir con lo que tenía hasta que descubrieron que podían recibir ayuda y protección de ACNUR si se registraban como refugiados. El registro de esta familia se ha producido justo a tiempo: durante los últimos 30 días sus únicos ingresos provenían del hijo de 11 años, que ganaba 28 dólares a la semana. Han estado alimentándose a base de pan y otros alimentos básicos. "Me preocupa el dinero y que mis hijos sobrevivan," comentaba Dana mientras esperaba en el centro de registro de Zahle. "Pienso en buscar un trabajo pero me preocupa no encontrarlo. Aún tengo la esperanza de que ACNUR me pueda ayudar". La semana pasada más de 980 familias llegaron al centro tras haber huido del conflicto en Siria en busca de refugio en el Valle de Bekaa. "Aquí en Zahle registrábamos alrededor de 1.200 o 1.300 personas al día", apunta Phillip Kibui, un oficial de registro de ACNUR. "Necesitamos terminar con el tiempo de espera". Las cifras muestran que ese objetivo, a primera vista, se está cumpliendo en el Líbano. En abril, cuando más de 90.000 refugiados fueron registrados, los periodos de espera habían pasado de un mes a 28 días de media a lo largo de todo el país. Cada mes más de 250.000 refugiados huyen de Siria y ACNUR está trabajando intensamente para cubrir las necesidades de todos los que han cruzado la frontera siria. Sólo en el Líbano 4.200 refugiados acuden diariamente al ACNUR para registrarse. El registro es el primero y más importante de los pasos para garantizar que los refugiados tengan derechos legales en los países a los que huyen. También es la base para que puedan empezar a recibir ayuda y materiales como colchones, utensilios de cocina, mantas y asistencia sanitaria, alimentos y educación. ACNUR ha puesto todo su esfuerzo para reducir el tiempo de espera para registrarse a pesar del gran número de sirios que llegan a Líbano. El resultado ha sido que la mayoría, sobre todo mujeres y niños, han visto reducido su riesgo de vulnerabilidad. El éxito de la Agencia de la ONU para los Refugiados se ha basado en una doble estrategia: por un lado aumentando el personal en las oficinas de registro, y por otro reestructurando todo el proceso. Durante los últimos tres meses el número de trabajadores en el centro de registro de ACNUR en Zahle ha pasado de 15 a 21. Al mismo tiempo la Agencia ha sido especialmente cuidadosa en centrar sus esfuerzos en entrevistar a los recién llegados para asegurar que las madres solteras, menores no acompañados, gente mayor y víctimas de tortura son atendidos debidamente. Algunos sirios no se registran por miedo. Las comunidades minoritarias temen que el registro pueda traer consigo las represalias de otros refugiados o de alguno de los muchos grupos étnicos y religiosos dentro del Líbano. ACNUR trabaja con algunas comunidades y organizaciones de caridad religiosas para animarlos a seguir adelante con el registro.
Bajo el título “En favor de quien más lo necesita”, el alumnado del Colegio Enrique Tierno Galván de Getafe (Madrid) participó en una exposición benéfica de pintura. La solidaria iniciativa surgió dentro del “Taller de Arte libre” de la actividad extraescolar de pintura del colegio; las obras estuvieron expuestas del 14 al 30 de abril en el Centro Cívico Buena Vista (Getafe). Durante los días que estuvo instalada la exposición, se vendieron los dibujos realizados por los niños y niñas que pusieron su arte al servicio de las personas refugiadas. La recaudación de 120 euros se ha destinado a los programas de ACNUR para asistir a la población siria que se está refugiando en Jordania, Turquía, Irak y Líbano.