La situación de los menores no acompañados

“Nos cuidamos la una a la otra. No sabemos qué nos deparará el futuro”, explica Nyamach Lul, una joven de 17 años. Ella y su hermana Nyakoang, de 14, son ahora menores no acompañadas: dejaron atrás a su familia y amigos debido al conflicto en Sudán del Sur, del que ya han huido 2,2 millones de sursudaneses. Dos tercios de ellos son niños: la de Sudán del Sur es una de las crisis con un mayor número de menores no acompañados.

En 2018, más de 138.600 niños solos, como Nyamach y Nyakoang, solicitaron asilo en países distintos a los suyos. Sin embargo, se estima que la cifra real es mayor, debido a los pocos datos reportados.

Nyamach Lul, refugiada de 17 años de Sudán del Sur

¿Cuáles son los peligros a los que se enfrentan los menores no acompañados?

Los menores no acompañados son aquellos que han huido solos o que se han visto separados de sus padres o familiares durante la huida y no tienen a ningún adulto responsable a su cargo. Sin la protección de una familia o un adulto, los niños que están solos corren diferentes riesgos durante su huida:

• Explotación. Cuando los niños están solos, en ocasiones tienen que buscar trabajo para poder sobrevivir. Se convierten en víctimas de esclavitud sexual, se ven envueltos en trabajos forzosos o incluso pueden llegar a convertirse en niños soldado.
• Abuso. Muchos niños se convierten en víctimas de violencia, explotación y trata de personas cuando no cuentan con un adulto o una familia que les proteja.

ACNUR pudo entrevistar en 2013 a 404 menores no acompañados de entre 12 y 17 años que huyeron de Centroamérica y México. Algunas de las razones que dieron para abandonar sus hogares fueron las siguientes:

• Violencia en la sociedad.
• Abuso en sus hogares.
• Falta de bienes elementales.

La situación en Europa

Durante los primeros seis meses de 2019 llegaron 8.236 niños a Grecia, España, Italia y Bulgaria. De ellos, 2.794 eran menores no acompañados. Aunque sigue siendo una cifra muy alta, es un 21% menor en comparación con el mismo periodo de 2018.

Estos son algunos datos sobre llegadas de menores a Europa:

• El 35% de los menores que llegaron a Grecia, Italia, Bulgaria y España entre enero y junio de 2019 eran niñas; el 65%, niños.
• El país al que llegaron más niños solos fue Italia: el 75% de los menores que llegaron lo hicieron sin su familia o un adulto que cuidase de ellos.
• Sin embargo, en Grecia la cifra de niños solos desciende hasta el 17%.
• La mayoría de los niños que llegan solos a Grecia, Italia y Bulgaria tienen entre 5 y 17 años.
• De las 20.200 personas que solicitaron asilo en Europa en la primera mitad de 2019, el 51% eran niños.

Dada la situación a la que se enfrentan estos niños a su llegada a Europa, ACNUR da varias recomendaciones a los gobiernos europeos para poder proteger a los menores no acompañados:

• Mejorar las condiciones de hacinamiento de los centros de recepción donde haya niños solos o separados de sus familias.
• Disponer de infraestructuras adecuadas a las edades de los niños.
• Realizar evaluaciones de edad.
• Facilitar la reagrupación familiar en la medida de lo posible.
• Posibilitar el acceso a la información y la educación a los niños.
• Nombrar trabajadores sociales o tutores legales para los menores.

El primer traslado de menores no acompañados en Europa

ACNUR, la OIM (Organización Internacional para las Migraciones) y UNICEF celebraron el 15 de abril de 2020 la reubicación de 12 menores no acompañados solicitantes de asilo desde Grecia a Luxemburgo. Estos 12 niños y niñas llevaban meses viviendo en centros de recepción en las islas griegas de Lesbos, Samos y Quíos. Por otro lado, Alemania también ha reasentado a 49 menores en Hanover.

Estas son solo las primeras reubicaciones, pero la Unión Europea espera trasladar a 1.600 menores no acompañados próximamente.