Desde 2004, año en el que empezó a operar Boko Haram en Nigeria, son más de 2 millones y medio de personas las que han tenido que huir a causa...
Desde 2004, año en el que empezó a operar Boko Haram en Nigeria, son más de 2 millones y medio de personas las que han tenido que huir a causa de la violencia y más de 20.000 personas han perdido la vida.
La violencia de Boko Haram incluye secuestro de niñas, delitos de violencia sexual o tráfico de mujeres esclavizadas. También hay que mencionar las incursiones a aldeas para arrasar y quemar cientos de miles de casas. Todo esto hace que sea cada vez más la cantidad de nigerianos que se ven forzados a huir y que necesitan de acceso al agua potable, comida y un techo tras esta huida forzada.
En 2014, este grupo perpetró un secuestro que conmocionó al mundo entero y que puso en boca de millones de personas el nombre de este grupo. En la ciudad de Chibok, unas 276 niñas eran secuestradas por Boko Haram cuando se dirigían a la escuela.
Muchas consiguieron escapar, pero muchas otras siguen en paradero desconocido. Y se teme lo peor para estas niñas en manos de Boko Haram, teniendo en cuenta las acusaciones de tráfico sexual, mutilación genital, violaciones y otros delitos contra las mujeres en Nigeria. También se habla de que muchas mujeres son obligadas a casarse de manera forzada con sus secuestrados y que suelen ser usadas como armas de guerra, convirtiéndose en escudos humanos o en niñas bomba. Las mujeres son el sector de la sociedad más afectado por la violencia de Boko Haram, si tenemos en cuenta que en los últimos 4 años, han sido secuestradas más de 2.000 mujeres y niñas en Nigeria.
La zona próxima al lago Chad sigue recibiendo día a día a cientos de refugiados que huyen de la violencia de Boko Haram en Nigeria. Los últimos datos recabados por ACNUR hablan de más de 228.000 nigerianos que viven como refugiados en esta amplia zona que se extiende entre las fronteras de Níger, Chad, Nigeria y Camerún. Y de unos 2,4 millones de desplazados internos en todo el país.
Los testimonios de muchos de los desplazados tras los ataques de Boko Haram son desgarradores. Hablan de disparos por la espalda, cientos de cadáveres apilados, robo de agua y de comida en aldeas donde la gente se quedó sin nada, asesinatos de hijos frente a sus padres y otros actos de extrema crueldad. ACNUR trabaja para conseguir una mejor calidad de vida de estos millones de nigerianos que huyen de la violencia de Boko Haram. Con tu ayuda podemos seguir ayudando a quienes lo han perdido todo.
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