Un campo de refugiados se crea para dar cobijo, durante un periodo determinado, a un grupo de personas que han tenido que dejar su hogar y ahora buscan un lugar mejor donde poder rehacer sus vidas. Los habitantes de un campo de refugiados no solo necesitan un lugar en el que dormir, sino también alimentos y asistencia médica. Para que entiendas mejor su funcionamiento, hoy vamos a hablarte de la anatomía de un campo de refugiados.
Campo de refugiados: en ocasiones una pequeña ciudad
Los desplazados que llegan a un campo de refugiados lo hacen con diferentes necesidades. A veces, su situación se soluciona en un plazo breve, pero otras tienen que quedarse allí durante años. Por ejemplo, los refugiados de Kosovo en Albania estuvieron en el campo tan solo tres meses, pero los de Somalia viven en los campos de Kenia desde 1991. Después de todo este tiempo, han ido construyendo una verdadera comunidad en una especie de campamento de refugiados con las necesidades propias de una ciudad, que necesitan una planificación específica.
¿Cómo son los campos de refugiados?
Existen unas normas básicas para la construcción de estos asentamientos recogidas por varios organismos como ACNUR, Cruz Roja e Oxfam Intermón en documentos que se usan como consulta a la hora de satisfacer este tipo de necesidades. Estas son algunas de sus premisas para entender qué es un campo de refugiados:
- Emplazamiento: Normalmente se sitúan en las proximidades de núcleos de población, en zonas seguras lejos de áreas de guerra o fronteras. Lo ideal es conseguir un sitio con una ligera pendiente para que tenga un drenaje natural.
- Participación de la población en el diseño: Para saber qué estructura será la que solucione mejor sus necesidades, se involucra a los afectados en el proceso. Con esto se consigue un mayor aprovechamiento de los recursos y hacer un análisis más exhaustivo de lo que necesitan.
- Estructura: Los campos de refugiados tienen una planta geométrica y su disposición es sencilla. El objetivo es facilitar al máximo la vida en la zona y la obtención de recursos en las diferentes áreas de las que se compone. Se organizan en distritos y estos en barrios o unidades vecinales, para que todos puedan acceder de forma sencilla a los recursos puestos a su disposición.
- Seguridad: El gobierno anfitrión suele poner en marcha mecanismos de seguridad para los refugiados, a fin de evitar que grupos organizados u otros peligros entren en el área de refugio. Además, también se pone en marcha un protocolo interno que evite los robos de efectos personales, las agresiones y la violación de mujeres.
- Viviendas: Se recomienda un espacio mínimo de 3,5 metros por persona para garantizar su comodidad y su seguridad. ACNUR dispone de diferentes tipos de refugios, como tiendas provisionales o estructuras más duraderas para largas estancias.
- Administración y servicios: Los campos de refugiados habitualmente disponen de una recepción de nuevos refugiados, dotada de áreas sanitarias y administrativas, para ayudarles en los trámites necesarios para ser registrados o identificados; de tiendas proveedoras de alimentos, que dependen de una sede central y que trabajan por distritos y barrios; de equipamiento sanitario como letrinas e incluso de servicios de educación.
- Otros servicios: Además de los servicios básicos sanitarios, de alimentación y de administración, ya hemos visto que algunos campos de refugiados también disponen de servicios educativos, de recursos de justicia para solucionar posibles problemas e incluso de un cementerio para honrar a los muertos.
En este post hemos tratado de acercarte a la anatomía de un campo de refugiados con el fin de que entiendas cómo viven los millones de personas que han tenido que dejar sus hogares para buscar una oportunidad mejor.
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