El objetivo principal del ACNUR es garantizar que todas las medidas de prevención, preparación y respuesta al coronavirus estén alineadas con los derechos y las necesidades de los refugiados. Las personas refugiadas y desplazadas deben estar incluidas en los planes de vigilancia, preparación y respuesta frente a la emergencai del coronavirus.
ACNUR tiene como prioridades la descongestión de campamentos y asentamientos, el cuidado de la salud y las campañas de información y sensibilización; el acceso a agua, saneamiento e higiene y adopción de medidas de protección. El objetivo es evitar una castástrofe por culpa del coronavirus en los campos de refugiados.
La mejor medida para evitar el contagio es lavarse las manos. Por eso, ACNUR está aumentando la provisión de agua y jabón en los campos de refugiados y las comunidades de acogida.
En Bangladesh se han realizado capacitaciones sobre prevención y control de infecciones para 280 sanitarios que prestan servicios en los campamentos de rohingya, donde viven unos 855.000 refugiados. Además, personal de alrededor de 250 centros de salud están recibiendo formación sobre el sistema de alerta y respuesta temprana del ACNUR. 800 empleados en sectores clave, como agencias y organismos gubernamentales, también han recibido información.
ACNUR ha enviado a Irán 4,4 toneladas de material médico, como mascarillas, guantes y medicamentos esenciales para para poder responder al brote de COVID-19. También ha proporcionado equipos de protección personal para los trabajadores de la salud y artículos básicos de higiene, como jabón y toallas de papel desechables, a unas 7.500 familias de refugiados.
En Irak ACNUR ha distribuido equipos de protección personal, máscaras con filtros y zapatos desechables para usar en las fronteras y en los campos de refugiados. Para el personal médico en los campos, ha enviado máscaras quirúrgicas, guantes y batas médicas desechables.
En Jordania, los servicios esenciales principales campos de refugiados, incluidos hospitales, clínicas y supermercados, permanecen abiertos. Se están realizando controles de temperatura a la entrada de los campos de Zaatari y Azraq. Los servicios de agua y alcantarillado funcionan de manera normal. Se están llevando a cabo distintas medidas de control y prevención.
En Siria, ACNUR trabaja de acuerdo a los estándares de la OMS desde los centros de atención primaria, con trabajadores de la salud y equipos de voluntarios especializados en la asistencia a refugiados. Las campañas de información y sensibilización hacen hincapié en la importancia de llevar a cabo estrictas medida de higiene y en el lavado de manos adecuado.
En Etiopía, en las fronteras con Sudán y Sudán del Sur se están realizando pruebas de detección a recién llegados para poder aislar cualquier caso sospechoso. Los socios del ACNUR han empleado y capacitado a refugiados como trabajadores comunitarios para ayudar a difundir la información, también entre las personas refugiadas en áreas urbanas. Las actividades generales de promoción de la higiene, incluido el lavado de manos, se están reforzando en todos los campamentos de refugiados.
En Uganda, existen instalaciones de lavado de manos y control de temperatura en los puntos de entrada, así como en los centros de tránsito, de recepción e instalaciones sanitarias. También se están llevando a cabo otras medidas para mejorar la comunicación con los refugiados sobre higiene y saneamiento, aumentar la distribución de jabón y capacitar a los trabajadores de la salud.
En Colombia, se han instalado más de 30 líneas telefónicas para proporcionar información a los refugiados y migrantes de Venezuela sobre los derechos, la protección y la seguridad de las rutas. También se les informa sobre el procedimiento de solicitud de asilo, salud, educación y documentación. Los refugios se están adaptando para reforzar las medidas de higiene. Además, en el principal centro de recepción en la frontera se han instalado puntos de lavado de manos y se ha identificado un área de aislamiento.
En Brasil, ACNUR y sus socios han establecido un área de aislamiento en Boa Vista para albergar los casos sospechosos y están distribuyendo 1.000 kits de higiene a las poblaciones indígenas en Belem y Santarem. Se están realizando campañas de información y sensibilización en refugios, asentamientos informales, centros de documentación y puntos de información.
En México, ACNUR está proporcionando alimentos y artículos de higiene personal a una red de refugios. Está proporcionando información y equipos para establecer áreas de aislamiento en caso de que sea necesario y ha identificado médicos refugiados, enfermeras y otros profesionales de la salud que podrían movilizarse para ayudar en la respuesta a COVID-19.
En Grecia, ACNUR está ampliando los servicios locales de agua y saneamiento en las áreas de acogida de refugiados en las islas del Egeo, donde 35.000 refugiados viven en centros y sitios superpoblados. Además, se están creando o renovando los refugios que se podrían usar para la detección, el aislamiento y la cuarentena. Está facilitando el acceso a información de calidad para los solicitantes de asilo. Todas las medidas puestas en marcha tienen como objetivo prevenir del coronavirus a los refugiados.
Desde el canal de Twitter del Comité español de ACNUR, puedes seguir al detalle todo lo que está haciendo ACNUR en los distintos países del mundo para proteger a los refugiados contra el COVID-19.
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