La emergencia sanitaria por coronavirus ha agravado aún más la situación desesperada de millones de refugiados y migrantes venezolanos que se encuentran en distintos países de América Latina.
Por eso, desde Argentina, Chile, Uruguay, Paraguay, Brasil, Perú, Colombia, Canadá, México, Panamá y República Dominicana, estos 50 músicos han querido grabar Algo está pasando, un tema original de la orquesta Latin Vox Machine. Con la música pretenden acortar la distancia que hoy les separa y promover un sentimiento de unidad, de solidaridad y de esperanza en estas circunstancias difíciles.
La crisis de migrantes y refugiados de Venezuela es una de las mayores del mundo. Hasta la fecha, más de 5 millones de personas han abandonado sus hogares. El apoyo y la solidaridad de la comunidad internacional es hoy más importante que nunca.
Precisamente para concienciar a la comunidad internacional sobre esta crisis y para movilizar recursos, el 26 de mayo se celebra virtualmente la Conferencia Internacional de Donantes en favor de los refugiados y migrantes venezolanos. El evento está organizado conjuntamente por España y la UE (Unión Europea), con la colaboración de la Agencia de la ONU para los refugiados (ACNUR) y de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM).
Los organizadores advierten a la comunidad internacional sobre la seria falta de atención que se le otorga a esta crisis, que se ha agravado por la expansión de la pandemia en los países de acogida de desplazados venezolanos.
5,1 millones
de refugiados y migrantes venezolanos.
4,3 millones
de venezolanos refugiados en países de América Latina y el Caribe
895.777
solicitudes de asilo de venezolanos en todo el mundo.
El cierre de fronteras y la cuarentena generalizada están agravando la situación económica de millones de refugiados y migrantes venezolanos que no pueden hacer frente a sus necesidades más básicas debido a la falta de ingresos. Ante la imposibilidad de ganarse la vida, muchos se exponen a la indigencia, la explotación, la violencia de género o los abusos. La gran mayoría de ellos necesita ayuda urgente para acceder a techo, comida y atención médica.
Muchos no pueden cumplir con las medidas de higiene y distanciamiento físico, lo que aumenta el riesgo de estigmatización. Algunos no pueden acceder a programas de salud y protección social nacional. Los que carecen de documentación corren el riesgo de sufrir exclusión social, lo que les convierte en doblemente vulnerables.
Con el cierre de escuelas y universidades en toda la región, miles de niños y jóvenes refugiados han dejado de recibir educación por la falta de acceso a internet.
“Los venezolanos en toda la región ahora se enfrentan al hambre, la falta de acceso a la atención médica, las perspectivas de la falta de vivienda y la xenofobia”.
Eduardo Stein, Representante Especial Conjunto ACNUR-OIM.
Ayuda a los refugiados