La nueva instalación de emergencia de Kara Tepe ha sido creada por el gobierno griego para albergar a las personas solicitantes de asilo afectadas por los incendios que comenzaron el pasado 8 de septiembre en el centro de acogida de Moria, en Lebos. Estas personas están cansadas y preocupadas por su futuro, pero parecen aliviadas por estar recibiendo ya ayuda de emergencia básica y cobijo.
Las autoridades griegas son las responsables de la gestión del nuevo asentamiento, que tiene una capacidad para 8.000 personas. Cerca de 5.000 solicitantes de asilo ya han sido realojados en la nueva ubicación.
Como medida de prevención frente al coronavirus, todas las personas que acceden al nuevo sitio se están sometiendo a pruebas rápidas de COVID-19. Hasta la fecha, se han detectado 150 casos positivos, que están recibiendo atención médica y se encuentran en cuarentena en un área de aislamiento dentro del sitio.
“Estoy agradecido porque mi familia está a salvo, pero ha sido muy duro tener que huir de los incendios en medio de la noche solo con lo puesto”.
Mohammed Sadik Jalani, refugiado sirio afectado por los incendios.
Las nuevas instalaciones están concebidas como una solución temporal y de emergencia, destinadas a cubrir las necesidades inmediatas y urgentes de las personas afectadas por el incendio en Moria, como un refugio, alimentos, agua, saneamiento y atención médica.
ACNUR apoya su uso como solución temporal, pero advierte de que lo que puede considerarse adecuado en términos de refugio y servicios básicos en una situación de emergencia no es apropiado para el largo plazo.
Lo ocurrido en Moria demuestra la necesidad de tomar medidas que mejoren las condiciones de vida, la seguridad, la infraestructura y el acceso a los servicios en la zona.
ACNUR advierte de la necesidad de abordar con urgencia la crítica situación en la que viven los solicitantes de asilo en las islas griegas del Egeo y apoya los debates encaminados a encontrar soluciones duraderas para estas personas, incluidas las transferencias seguras y ordenadas al continente y las reubicaciones apoyadas por la UE.
En este sentido, ACNUR ha celebrado la decisión del Ministro de Migración y Asilo griego de trasladar a los cerca de 400 menores no acompañados que vivían en las islas a un alojamiento adecuado en el continente, al que están asistiendo ACNUR y la OIM.
ACNUR ve en el Pacto de la Comisión Europea sobre Migración y Asilo un instrumento eficaz para garantizar más apoyo, solidaridad y responsabilidad compartida con países, como Grecia, que se enfrentan a enormes retos. Es una oportunidad para que la UE y los Estados miembros aborden estos problemas de manera conjunta.
Grecia necesita el apoyo de los estados y las instituciones europeas para proporcionar protección a las personas desplazadas. ACNUR seguirá apoyando a las autoridades griegas para responder a los desafíos a corto y a largo plazo.
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