Chad, uno de los países más pobres del mundo, acoge ya a más de un millón de personas refugiadas procedentes de Sudán. La mitad de ellas llegaron a este país hace más de quince años, y viven desde entonces en 14 campamentos que se fueron abriendo paulatinamente al Este del país. Pero el reciente conflicto de Sudán ha provocado, además, que en el último año hayan llegado más de 500.000 nuevas personas refugiadas a esa misma región. La situación ha desbordado claramente los escasos recursos que el país tiene para afrontar los diferentes retos que supone la acogida tanto de la antigua población refugiada, como de la recién llegada.
De entre las acciones más urgentes se encuentra reubicar a las personas recién llegadas lo antes posible, ampliar la capacidad de los campos existentes o habilitar nuevos campamentos y garantizar la protección de las personas más vulnerables. Todas ellas se superponen a los esfuerzos humanitarios y de desarrollo que se habían llevado a cabo en las dos últimas décadas para mejorar las condiciones de vida de la población sudanesa y de la población chadiana de acogida.
Otro gran desafío continúa siendo el acceso al agua potable y a instalaciones de saneamiento adecuadas en los campamentos, teniendo en cuenta que se trata de una región semidesértica y que ha doblado su población en el último año. Por este motivo, ACNUR continúa necesitando el apoyo de la comunidad internacional para poder afrontarlo. Conocedora de ello, la Diputación de Jaén apoyó en 2023 los esfuerzos de ACNUR y sus socios para mantener y aumentar las infraestructuras de agua en algunos de los campos ya existentes, habilitar más de 7.000 metros de tuberías y apoyar a los comités que gestionaban el buen uso de las instalaciones de agua, entre otras actividades. Mediante un nuevo convenio firmado en 2024, continuará apoyando también el desarrollo de nuevas infraestructuras de agua, letrinas o duchas de emergencia tanto en la ampliación de campos que ya existían, como en el campo de Allacha, uno de los nuevos campamentos que se han habilitado para alojar a las miles de personas que están huyendo del conflicto de Sudán. La Diputación de Jaén muestra así nuevamente su solidaridad con las personas refugiadas de todo el mundo, y especialmente con las más vulnerables.
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