El talent show de los refugiados

700 personas, entre refugiados y keniatas, esperan entre el calor y el polvo para participar en este concurso de talentos. Es la quinta edición de este “talent show” de refugiados que comenzó en 2014 para involucrar a los jóvenes en actividades constructivas en el periodo de vacaciones escolares.

“Los refugiados tienen talento y habilidades. La única diferencia entre cualquier otra persona y ellos, es que tuvieron que cruzar una frontera para salvar sus vidas”, dice Collins Onyango, Gerente de Área de la Federación con sede en el campamento.

Durante 3 días, y gracias a la ayuda de ACNUR, el concurso buscó a las personas más talentosas con habilidades musicales, danza, modelos y sketch cómicos. “Los jóvenes que estamos aquí en el campamento somos la próxima generación. Podemos hacer algo con el futuro y somos capaces de hacerlo”, dice una de las ganadoras.

“La mayoría de las personas cree que todo les pertenece a los chicos, incluso el baile. Decidimos que este año demostraríamos que, si un hombre puede, una mujer también e incluso mejor”, cuenta Fardose Daub, una refugiada sudanesa que forma parte del grupo de baile femenino “Capable Girls”.

El fuerte aplauso de la audiencia al terminar su enérgica actuación llevó a las jóvenes bailarinas a ganar el tercer premio de baile de niñas, un premio que supone un efectivo de 100 dólares.

Los ganadores de otras categorías, como música, fotografía, danza cultural o masculina, comedia y moda se llevaron premios de entre 50 y 250 dólares.

Aunque Kakuma fue el primero, no ha sido el único concurso de talentos que ha tenido lugar en un campo de refugiados africano.

También en 2018, Jesús Vázquez llegaba a Mai Aini, un campo de ACNUR en Etiopía para dar voz y encontrar a las personas con más talento entre los refugiados somalíes.

El resultado, lo contaba en una emotiva entrevista donde mostraba su recorrido con la Agencia de la ONU para los Refugiados.