Bahamas en emergencia tras el huracán Dorian

El huracán Dorian arrasó las Bahamas dejando un saldo de 30 muertos y miles de personas desaparecidas, por lo que se prevé que la cifra de fallecidos crezca según estimaciones de la Organización Mundial de la Salud.

El huracán Dorian comenzó su acción en las Bahamas el viernes 6 de septiembre en la categoría 5 de intensidad, lo que significó el más alto nivel de un fenómeno de este tipo que toca tierra en la costa atlántica. Después bajó a la categoría 4 y se mantuvo así durante dos días, para seguir bajando de nivel hasta alcanzar el grado 1, dando un respiro para las islas.

Los daños que dejó el huracán Dorian en Gran Bahama y en las islas Ábaco fueron muy grandes. Una imagen satelital muestra que Gran Bahama quedó en un 60% de su superficie bajo el agua con cientos de personas que han perdido sus casas y se encuentran en refugios.

En las islas Ábaco viven más de 17.000 personas, mientras que en Gran Bahama la población llega a los 51.000 habitantes. La acción de la ONU en la zona se ha activado enseguida, prestando asistencia a la población en diferentes aspectos.

La labor de la ONU tras el huracán Dorian

En Nassau, la capital de Bahamas, la ONU ha desplegado sus equipos para hacer frente a la acción devastadora del huracán Dorian y la que muchos consideran la peor tormenta que ha habido en el país. Desde ahí, se vienen emprendiendo acciones en las zonas más afectadas: Gran Bahama e islas Ábaco, donde la tormenta llegó a tierra firme dejando mucha destrucción a su paso.

La ONU trabaja en conjunto con la Agencia de Manejo de Emergencias por Desastres del Caribe (CDEMA) y la Agencia Nacional de Manejo de Emergencias de Bahamas (NEMA) para asistir a las víctimas del huracán Dorian en las necesidades de vivienda, agua, recuperación temprana y alimentos.

De acuerdo con datos de la Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja, más de 13.000 viviendas quedaron dañadas o destruidas por completo. Esta cifra significa alrededor del 45 por ciento de todas las viviendas existentes en Gran Bahama y las islas Ábaco.

El huracán Dorian llegó a su ápice con la generación de vientos que alcanzaron un máximo de 320 km por hora y fuertes mareas provocadas por la tormenta. Y su acción destructora también llegó a hospitales y otras instalaciones sanitarias, destruyéndolas por completo.

El equipo médico preparado por la Organización Panamericana de la Salud ya se encuentra en la región y prevé instalarse allí durante un plazo mínimo de tres meses. Está compuesto por médicos, cirujanos, anestesiólogos, enfermeras y personal dedicado a la administración y a la logística. Todo esto, con el respaldo de 34 toneladas de equipamiento médico y tiendas de campaña.

La ONU estima que más de 70.000 personas en la región se encuentran en emergencia y necesitarán ayuda. De acuerdo con datos del Programa Mundial de Alimentos, más de 60.000 personas necesitarán comida tras el paso del huracán.

Otros huracanes y tifones en 2019

Pero el huracán Dorian no fue el único de este año, sino que se suma a otros que han afectado a la costa del Pacífico mexicano, como el huracán Alvin o el huracán Bárbara. Y también al tifón Faxai en Japón y a la tormenta tropical Barry en las costas de Nueva Orleans. 

Entre el 14 y el 16 de marzo de este año, el huracán Idai causó estragos en el sur de África, haciendo eclosión en Mozambique y afectando zonas de Zimbabue y Malawi. Con velocidades de más de 200 km por hora, causó la muerte de, por lo menos, 200 personas. Alrededor de 1,5 millones de personas quedaron en situación de emergencia, por lo que la acción de ACNUR fue sumamente necesaria y no se hizo esperar. El trabajo de ACNUR y sus socios se centra en garantizar el realojamiento de las familias que perdieron sus casas por la acción del huracán, con material de ayuda humanitaria y refugios de emergencia.