Esclavitud moderna: qué es, qué tipos existen y cómo combatirla Esclavitud moderna: qué es, qué tipos existen y cómo combatirla
matrimonio infantil

Esclavitud moderna: qué es, qué tipos existen y cómo combatirla

16 de abril, 2024

Tiempo de lectura: 5 minutos

Comparte

Cuando leemos o escuchamos la palabra “esclavitud”, el sentido común nos lleva a asociarla con algo que sucedía en otra época. Lamentablemente, la esclavitud sigue existiendo en la actualidad.

Un informe de la Organización Internacional del Trabajo, la Organización Internacional para las Migraciones y Walk Free de las Naciones Unidas estimó que 50 millones de personas vivían en “esclavitud moderna” (28 millones en trabajos forzados y 22 millones en matrimonios forzados) a finales de 2021. Eso supone un aumento de 10 millones de personas en solo cinco años.

Qué es la esclavitud moderna

Un esclavo es una persona que carece de libertad por estar bajo el dominio de otra. La esclavitud es una sujeción excesiva por la que una persona somete a otra a una obligación o trabajo. Y aunque, como decíamos anteriormente, pueda parecer de otra época, la esclavitud continúa siendo un flagelo muy vigente en diferentes partes del mundo, por lo que no se puede decir que haya desaparecido, sino que ha mutado, se ha transformado adquiriendo nuevas facetas. A diferencia de lo que podamos pensar, se da en muchos países y atraviesa líneas culturales, étnicas y religiosas.

Tipos de esclavitud moderna

La trata de personas, el matrimonio forzado, la esclavitud sexual y el trabajo infantil son las principales formas que adquiere la esclavitud en el siglo XXI, y afecta a la población más vulnerable del planeta.

  • Trata de personas

Se estima que la mayoría de los países del mundo están afectados por la trata de personas, ya se trate de un país de destino, de tránsito o de origen. Las personas que sufren de trata se ven sometidas a múltiples explotaciones de índole sexual, trabajos forzados, servidumbre y hasta extracción de órganos.

El Informe Global sobre el Tráfico de Personas 2022, confeccionado por la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC), asegura que el número de víctimas a escala mundial descendió 11% en 2020 con respecto al año anterior, debido al menor número de detecciones en países de ingresos bajos y medios. Parece que la pandemia redujo las oportunidades de actuación de los tratantes, pero pudo haber debilitado la capacidad de las autoridades para detectar a las víctimas.

El informe detalla cómo la guerra y los conflictos vuelven a las personas afectadas mucho más vulnerables ante los delincuentes. Se ha comprobado que la guerra en Ucrania ha elevado la trata de personas en la población desplazada. La mayoría de las víctimas resultantes de los conflictos tienen su origen en países de África y Oriente Medio.

victima de violencia

  • Trabajo forzoso

Según la Organización Internacional del Trabajo (OIT), el trabajo forzoso es "todo trabajo o servicio exigido a un individuo bajo la amenaza de una pena cualquiera y para el cual dicho individuo no se ofrece voluntariamente".

La mayoría de los casos se dan en el sector privado, los relacionados con la explotación sexual comercial representan un 23% del total, cuyas víctimas son en su mayoría (casi cuatro de cada cinco) mujeres o niñas. Un 63% del total corresponde a sectores distintos de la explotación sexual.

  • Trabajo infantil

La Organización Internacional del Trabajo estima que hay 152 millones de niños en todo el mundo que trabajan, muchos incluso antes de aprender a leer o escribir. Y alerta sobre el flagelo del trabajo infantil, que quita a los niños y niñas la posibilidad de desarrollar su infancia con normalidad, los aleja de la escuela y afecta a su dignidad.

De acuerdo con datos de ACNUR, sólo el 65% de los niños refugiados están escolarizados en primaria. Muchos de estos niños que no van a la escuela tienen que trabajar para ayudar a su familia, de manera que la causa de su falta de escolarización está íntimamente ligada con el trabajo infantil.

Otra causa de este grave problema es cuando las niñas y niñas están solos, sin padres ni tutores, es decir, sin un respaldo familiar que les garantice el acceso a los medios básicos para su subsistencia. A muchos menores no acompañados no les queda más remedio que buscarse un trabajo para sobrevivir.

  • Matrimonio forzado

Según Naciones Unidas el matrimonio infantil y forzado es una violación de los derechos humanos y una práctica nociva que afecta de forma desproporcionada a las mujeres y las niñas en todo el mundo, impidiéndoles vivir sus vidas libres de toda forma de violencia.

El matrimonio infantil (menores de 18 años) se considera una forma de matrimonio forzado. Esto amenaza su futuro, ya que les priva de su capacidad de decisión sobre sus vidas y las hace más vulnerables a la violencia, el abuso y la discriminación.

De acuerdo con datos del Fondo de Población de las Naciones Unidas (FNUAP), 14,2 millones de niñas son obligadas cada año a contraer matrimonio forzado y a una edad muy temprana. Esto significa una privación de los derechos humanos fundamentales, tanto en el acceso a la educación como en la posibilidad de planificar su futuro a largo plazo. Según UNICEF, más de 650 millones de mujeres vivas hoy en día se casaron cuando eran niñas, 28 niñas cada minuto.

Las mujeres refugiadas son especialmente vulnerables a los matrimonios forzados y los países donde se registra la mayor tasa de esta otra forma de esclavitud en el siglo XXI son Chad, Níger y República Centroafricana.

Soluciones a la esclavitud moderna

Según el informe de la Organización Internacional del Trabajo, Walk Free y la Organización Internacional para las Migraciones la esclavitud moderna proponen tomar medidas conjuntas y lo más rápidas posibles para poder avanzar de manera significativa en la lucha contra ella. Algunas de estas medidas serían:

  • Mejorar y hacer cumplir las leyes e inspecciones de trabajo.
  • Poner fin al trabajo forzoso impuesto por el Estado.
  • Reforzar las medidas para combatir el trabajo forzoso y la trata de personas en empresas y cadenas de suministro,
  • Promover la contratación justa y ética.
  • Ampliar la protección social.
  • Reforzar las protecciones legales, incluida la elevación de la edad legal para contraer matrimonio a los 18 años sin excepción.
  • Mayor apoyo a las mujeres, niñas y personas vulnerables.

Pero sin duda, una de las mayores armas para luchar contra la esclavitud moderna es la educación. Gracias a la educación se puede proteger a los niños y niñas del reclutamiento forzado, el trabajo infantil, la explotación sexual y el matrimonio infantil. La educación les protege y empodera, dándoles conocimientos y habilidades para llevar vidas independientes y poder construir sus vidas.

Educación: el arma que salva vidas

Ayuda a los refugiados

  1. ACNUR
  2. Blog
  3. Esclavitud moderna: qué es, qué tipos existen y cómo combatirla