El desplazamiento forzoso conlleva problemas materiales como la escasez de recursos, la ausencia de bienes o la falta de medios para la supervivencia, entre otros. Sin embargo, una mirada detallada...
El desplazamiento forzoso conlleva problemas materiales como la escasez de recursos, la ausencia de bienes o la falta de medios para la supervivencia, entre otros. Sin embargo, una mirada detallada al problema nos obliga a poner énfasis en las secuelas psicológicas que causa: por ejemplo, cómo superar el miedo.
El miedo en los refugiados se origina básicamente por la incertidumbre sobre la nueva situación que viven. Muchos de ellos lo han perdido todo en el momento en que tomaron la decisión de abandonar sus hogares y se enfrentan a una situación completamente desconocida y en la que su vida está en peligro.
Sin embargo, el miedo no se manifiesta de una sola forma. Es común, por ejemplo, que vaya asociado a otros síntomas como la depresión, el desasosiego, la ansiedad, la ira, la irritabilidad, el nerviosismo y la preocupación por el futuro, tal como lo demuestran algunos documentos de ACNUR y la Organización Mundial de la Salud.
En los casos más graves, suele haber ataques de pavor o pánico, sensación de riesgo permanente, renuencia a relacionarse con otras personas o a salir a espacios abiertos, desconfianza y reacciones injustificadas ante situaciones que les recuerdan la guerra o los conflictos armados de los que tuvieron que huir para no morir.
Superar el miedo producido por una situación de desplazamiento forzoso es el primer paso de los refugiados para sobreponerse a la nueva realidad y reconstruir su vida, algo que se logra a través de la creación de elementos que ayuden a su supervivencia.
Parte de la solución está en la calidad de la atención que se les brinde en los lugares de acogida, como por ejemplo los campos de refugiados construidos para tal fin. Cuanto mejor sea la atención que allí se les suministre, menos probabilidades habrá de que los efectos negativos del desplazamiento se reproduzcan.
Como hemos dicho antes, esta atención no puede ser solo logística y material. Debe ser también psicológica y ocuparse de las necesidades relacionadas con la salud mental de los refugiados. Repasemos algunas claves que hay que considerar para ayudarles a superar el miedo:
A la hora de superar el miedo, es importante diferenciar entre el miedo como emoción y el miedo como sentimiento. Este último, que se caracteriza por instalarse en la visión de la realidad de las personas refugiadas, es uno de los principales enemigos que deben vencer para reconstruir su vida.
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