A pesar del exceso de comida de la sociedad actual, la desnutrición por falta de los alimentos necesarios sigue dejando víctimas mortales en muchos países. Cada día, 24.000 personas mueren de hambre, un tercio de ellos son niños.
¿Qué es la desnutrición?
Es el estado físico causado por la falta de la alimentación, ya sea por el hambre o por una dieta incompleta, de forma prolongada, que desencadena carencias de algunos nutrientes necesarios.
Mientras desnutrición es el déficit de nutrientes por la carencia en la ingesta, la malnutrición es consecuencia de una dieta desequilibrada tanto por falta como por exceso, provocando anemia u obesidad.
La falta de hierro, yodo o vitaminas A, B1, B2, B3, C o D a causa de la desnutrición conllevan síntomas que van desde el cansancio hasta enfermedades mortales.
En 2012, Naciones Unidas ponen en marcha el Proyecto Hambre con el objetivo de que el 100% de la población mundial tenga acceso a la alimentación. En los campos de ACNUR, se entregan suplementos nutricionales para distintos grupos con desnutrición:
Es un suplemento hecho con base de cacahuete que lleva leche, azúcar, suero de leche, leche, proteína de soja y cacao. Con 3 sobres al día, un niño puede recuperar 1 kilo a la semana. De media, cada niño necesita entre 2 y 3 meses para recuperarse.
Con 20 € puedes enviar suplementos para un niño durante 20 días.
Teniendo en cuenta las calorías necesarias diariamente para una persona se crean raciones para quienes que viven en los campos. Están compuestas de cereales y otros alimentos con las proteínas y grasas necesarias.
¿Cómo es una ración diaria de 1 € en África?
Fuera de los trastornos alimenticios, hay contextos sociales como la guerra y la pobreza que provocan la falta de alimentos. Las consecuencias son desoladoras.