En busca de una definición de humanidad

Durante siglos, las personas se esforzaron por buscar una explicación a los fenómenos que acontecían a su alrededor. Se crearon mitos desde tiempos ancestrales que relataban la creación del mundo, buscaban la razón detrás de las lluvias, la inundaciones o las plagas y achacaban a seres divinos las desgracias y los hechos afortunados que les ocurrían.

No fue hasta el periodo conocido como Renacimiento, en torno al siglo XV, cuando los humanos se volvieron hacia sí mismos y comenzaron a estudiarse como seres y como sociedades. Habían nacido las humanidades o ciencias humanas, como contraposición a las ciencias divinas. Su objetivo no era otro que dar con una definición de humanidad.

Quiénes éramos, cómo nos relacionábamos entre nosotros o qué estaba detrás de nuestras acciones eran las grandes preguntas que comenzaron a hacerse los pensadores y eruditos de la época y que, aún hoy, siguen sin tener una respuesta definitiva. Para dar con la solución, las universidades comenzaron a tomar distintas vías, pero siguiendo un método de estudio común, dando lugar a los que hoy conocemos como ciencias sociales, letras o, simplemente, humanidades:

• Historia
  
  Quizás la más antigua de las ciencias sociales, se dedica al estudio del pasado de la humanidad como búsqueda de una explicación al presente. Su nombre proviene del griego ἱστορία y podría traducirse como investigación o información. El considerado como padre de esta ciencia fue, el griego Heródoto, que dejó el primer relato estructurado y razonado de acciones humanas del pasado que ha llegado a nuestros días. Hoy en día podemos considerarla una ciencia transversal que está presente en todas las demás humanidades, dado que en todas ellas se recurre en algún momento al estudio del pasado, si bien de forma específica al campo de estudio de cada ciencia.
•  Sociología
  
  La sociología se encarga de estudiar a la humanidad como una estructura. Estudia los fenómenos que producen las sociedades humanas al actuar de manera conjunta, más allá de las consecuencias de las acciones individuales. Aunque el origen de esta ciencia puede ser atribuido a pensadores antiguos como Platón o Confucio o el árabe Abenjaldún, generalmente se rastrea su origen hasta el siglo XIX. Desde entonces se ha caracterizado por las diversas y contradictorias corrientes que ha generado, fruto del estudio de estructuras tan heterogéneas como las sociedades humanas.
• Lingüística
  
  La lingüística estudia todo lo relacionado con el lenguaje, el elemento que probablemente nos diferencia con más claridad del resto de animales. Su campo de estudio abarca desde la estructura de las lenguas hasta su evolución histórica, pasando por sus elementos puramente sociales, como los saludos, las fórmulas de cortesía o los distintos registros que utilizamos. El lingüista estadounidense Noam Chomsky es probablemente la figura más relevante en la actualidad en este campo.

• Economía
  
  La economía estudia los aspectos productivos de las sociedades humanas. Es decir, los productos que generan, cómo los fabrican, la forma en la que los intercambian y distribuyen y, en general, cómo las sociedades buscan prosperar y sobrevivir con unos recursos limitados. Ha sido una de las ciencias sociales más influyentes en la sociedad y en las grandes ideologías. Concordar con una u otra corriente de pensamiento económico ha supuesto pertenecer a grupos políticos enfrentados, incluso violentamente, a lo largo de la historia.

• Antropología
  
  La antropología es, probablemente, la más humanista de todas las humanidades. Su nombre proviene del griego y hace referencia concretamente al estudio del humano ánthrōpos. Estudia todos los aspectos relacionados con el ser humano y con su cultura, es decir, los conocimientos, usos y costumbres que transmite generacionalmente. Se generó como disciplina propia en el siglo XIX de la mano de autores como Franz Boas o Edward Tylor
• Politología
  
  La ciencia política estudia todo lo relacionado con la toma de decisiones que se aplican a todos los miembros de un grupo, desde el más simple, hasta una población de millones de individuos. Históricamente ha estado relacionado con el estudio de las estructuras de poder, fundamentalmente los estados. Es la ciencia que más bebe del resto de las mencionadas, pues el estudio de la política invariablemente abarca el de la historia, las sociedades, los lenguajes utilizados en forma de discurso, los modelos económicos y, por supuesto, la propia naturaleza humana.