El informe de ACNUR pone de manifiesto la falta de alternativas para los refugiados en Europa. Italia y España, las rutas más peligrosas del Mediterráneo, van en aumento.
En los últimos meses, Grecia se ha convertido en una opción menos atractiva para refugiados y migrantes que se adentran en el Mediterráneo hacia las fronteras de Europa. Esto supone optar por rutas más peligrosas y mortíferas. Miles de refugiados recurren a traficantes de personas a falta de vías legales para alcanzar un lugar seguro.
En lo que va de año, 487 personas ya han muerto intentando cruzar el Mediterráneo.
Refugiados en Europa: Dos motivos para cambiar su ruta
En 2016, más de 360.000 personas llegaron hasta las costas de Europa por mar. Muchos de ellos en manos de traficantes de personas a los que entregaron todo a cambio de la esperanza de una nueva vida. Pero Grecia, resulta la opción menos idónea para llegar a su soñada Europa. El flujo que generaba la ruta del Mediterráneo Oriental disminuye drásticamente al mismo tiempo que el riesgo se multiplica.
Según el informe publicado por ACNUR, cientos de personas salen cada mes desde Turquía hacia Europa. Si bien mayoría lo hace vía marítima, cada vez son más quienes optan por fronteras terrestres hacia Grecia y Bulgaria.
Aunque son rutas utilizadas por refugiados y migrantes, el 87% de las llegadas por mar a Grecia proceden de los 10 países con más refugiados, cifras muy similares a las de quienes llegan al noreste de Europa a través de los Balcanes Occidentales. En el caso de Serbia, más de 82% proceden de Afganistán, Irak y Siria, países con conflictos activos que obligan a escapar a sus habitantes.
“El informe muestra claramente que la falta de vías accesibles y seguras provoca que los refugiados y migrantes asuman riesgos enormes para intentar llegar a Europa”.
Vincent Cochetel, Director de la Oficina del Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados en Europa.
La ruta del Mediterráneo Central desde el Norte de África a Italia se ha convertido en el principal punto de entrada a Europa. Sin embargo, las principales nacionalidades de procedencia no han cambiando. Quienes llegan hasta las costas italianas proceden, principalmente, de Nigeria (21%) y Eritrea (11%). De las más de 180.000 personas que llegaron a Italia por mar en 2016, el 90% viajó en bote desde Libia.
A pesar de la disminución del flujo de personas hasta Europa, 2016 se convertía en el año más mortífero de la historia. De los más de 5.000 muertos que se reportaron, el 90% viajaba por la ruta hacia Italia.
Además, en la última parte de 2016, también se incrementa el número de llegadas a través de la ruta del Mediterráneo Occidental hacia España, tanto desde Marruecos y Argelia como a través de los enclaves de Melilla y Ceuta.