Esta tendencia es alarmante y supone un incremento de casi 1,8 millones de personas en 12 meses. Hace un año, el número de sirios registrados como refugiados por ACNUR o a la espera de registro era de 230.671 personas.
“Siria se ha convertido en la gran tragedia de este siglo, una desgraciada calamidad humanitaria que conlleva un sufrimiento y un desplazamiento sin precedentes en la historia reciente”, dijo António Guterres, el Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados “El único consuelo es la humanidad que están demostrando los países vecinos acogiendo y salvando las vidas de tantos refugiados”.
Más del 97 por ciento de los refugiados de Siria se encuentran en los países vecinos de la región, lo que supone para ellos una carga que desborda sus infraestructuras, economías y sociedades. Necesitan urgentemente un apoyo internacional masivo para ayudarles a hacer frente a esta crisis.
Reaccionando ante este triste récord, Angelina Jolie, la Enviada Especial de ACNUR expresó su consternación ante los niveles de muerte, destrucción y peligro que han empujado a tantos sirios a huir para salvar sus vidas.
"El mundo se arriesga siendopeligrosamente complaciente con el desastre humanitario de Siria. La marea de sufrimiento que ha desatado el conflicto tiene consecuencias catastróficas. Si la situación continúa deteriorándose a este ritmo, el número de refugiados se incrementará y alguno de los países vecinos podría llegar al borde del colapso”.
"El mundo se encuentra trágicamente desunido sobre la forma de detener el conflicto en Siria", añadió Angelina Jolie. “Pero no debería existir ningún tipo de desacuerdo acerca de la necesidad de aliviar el sufrimiento humano, y no hay ninguna duda en cuanto a la responsabilidad del mundo de hacer más. Debemos apoyar a los millones de personas inocentes expulsados de sus hogares y aumentar la capacidad de los países vecinos para gestionar este flujo”.
Con una media de unos 5.000 sirios huyendo cada día hacia los países vecinos, la necesidad de incrementar de manera significativa la asistencia humanitaria y la ayuda al desarrollo en favor de las comunidades de acogida ha llegado a un momento crítico. Ante la presión que el éxodo de refugiados está ejerciendo sobre los países vecinos, incluido el agravamiento del impacto económico, ministros de Irak, Jordania, Líbano y Turquía se reunirán con ACNUR en Ginebra el miércoles 4 de septiembre, en un esfuerzo por acelerar el apoyo de la comunidad internacional.
Esta cifra de dos millones se refiere a los civiles sirios que han sido inscritos como refugiados o que están pendientes de su registro. A finales de agosto, este número incluía a 110.000 personas refugiadas en Egipto, 168.000 en Irak, 515.000 en Jordania, 716.000 en el Líbano y 460.000 en Turquía. Aproximadamente el 52 por ciento de esta población son niños refugiados menores de 18 años. ACNUR anunció el pasado 23 de agosto, que el número de niños sirios refugiados había superado ya el millón.
Además, 4,25 millones de personas se encuentran desplazadas dentro de las fronteras de Siria, según las estadísticas del 27 de agosto publicadas por la Oficina de las Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios. En su conjunto, estas cifras -que suman más de seis millones de personas desplazadas por el conflicto- suponen que en la actualidad el número de ciudadanos sirios que se han convertido en refugiados o desplazados forzosos supera al de cualquier otra nacionalidad a nivel mundial.
ACNUR ayuda a los desplazados dentro de Siria y dirige la respuesta humanitaria a la crisis de refugiados en cada uno de los países vecinos. Las agencias humanitarias se enfrentan a una grave carencia de fondos, dado que sólo se ha recibido el 47 por ciento de las contribuciones necesarias para cubrir las necesidades básicas de los refugiados