Compartir
A sus 16 años, Nyahok sueña con volar muy alto. Quiere ser piloto de avión y no está dispuesta a que le digan que tiene que dejar de estudiar. Sabe que la educación le salvará de tener que mendigar, pero no es un reto sencillo. Sólo el 23% de los menores refugiados tienen acceso a educación secundaria.
Con 18 € al mes, puedes escolarizar a un niño como Nyahok durante todo un año.